Actitudes públicas

¡Qué divertido!. Nos imaginamos la ‘fiesta' que habrán hecho en la sede del PSC el ‘simpático' Miguel González, acompañado seguramente del secretario general de los socialistas lanzaroteños, Manuel Fajardo, que admitió autorizar el escrito, del secretario de organización, Carlos Espino y a lo mejor de alguien más, una vez concluido el comunicado que bajo el título “James Bond contra los malvados socialistas” comparaba a Mario Pérez con el famoso agente 007 y a la presidenta del Cabido y a la alcaldesa de Arrecife con “sus chicas” y que ha causado la ruptura del pacto de gobierno del Cabildo.

A pesar de que los socialistas han insistido en que este escrito, que con un humor ácido y de mal gusto denigraba a las representantes máximas de la isla de Lanzarote, no en vano una es nada menos que la presidenta del Cabildo y la otra la alcaldesa de la capital, no es el culpable de la ruptura del pacto del Cabildo, ni siquiera el cese del consejero ‘cachondo' Miguel González, todo apunta a que este nuevo 'epitafio' de Miguel González, hasta este jueves consejero de Educación y Cultura del Cabildo de Lanzarote, y no la rueda de prensa que, según el secretario general de los socialistas lanzaroteño se hizo a escondidas y de manera desleal, fue la gota que colmó el vaso en un pacto de gobierno que nunca funcionó y con el que se han recogido muy pocos frutos para Lanzarote.

Manuel Fajardo apuntaba en otro medio de comunicación de la Isla que no se podía responder de otra manera a una rueda de prensa en el que, entre otros, se tachaba a los socialistas de desleales, -¡qué sorpresa! -, después de pedir disculpas a las aludidas. Pero la cuestión no es pedir disculpas porque el daño ya está hecho y demuestra una vez más que aunque a algunos políticos se les llena la boca cuando hablan de las mujeres, de la necesidad de que las mujeres participen en la vida pública y de las famosas cuotas que establecen a regañadientes en algunos casos los partidos políticos, todos sabemos que muchos de ellos siguen viendo a la mujer en un estrato inferior al del hombre, a pesar de que en muchos casos superen en eficacia y trabajo a muchos hombres que están ocupando cargos públicos. Y el ejemplo lo tenemos en Lanzarote.

Siendo así, parece normal que de vez en cuando salga ese ‘ramalazo' machista que pervive en muchos de ellos y que en los momentos menos esperados aflora y en este comunicado se dejó entrever hasta el punto de que sus propias compañeras en el PSC hacían pública una nota de prensa en el que expresaban su “total y tajante desacuerdo” con el contenido del mismo. Nuria Cabrera y Emilia Osuna, concejalas del Ayuntamiento de Arrecife, negaban las afirmaciones de Manuel Fajardo en el sentido de que el escrito era del PSC y no de Miguel González, y manifestaban que “como mujeres, como progresistas, como socialistas y, sobre todo, como personas rechazamos las formas en las que el secretario de comunicación se dirige a las mandatarias de Arrecife y del Cabildo en el escrito mencionado”.

Pero es más, no es un insulto a las políticas sino a todo el colectivo femenino que de una manera libre y democrática intenta hacerse un hueco en esa sociedad que no acaba de asumir que las mujeres pueden competir en igualdad de condiciones con el hombre e incluso en algunos casos superarlo. Las actitudes públicas son muy importantes y Miguel González con su escrito ha demostrado que él y probablemente algunos más del partido no aceptan en cierta forma las reglas del juego democrático, haciendo chistes fáciles de algo tan serio como es la política y todo lo que rodea a la misma.

Los socialistas están convencidos de que van a ganar las elecciones, ya lo decía ayer el propio Miguel Ángel Leal, que con 20 días tenían suficiente para recomponer un partido dinamitado por los propios socialistas. Las encuestas parece que también le son favorables pero esperemos que no ocurra lo de Barcelona con el ex ministro José Montilla, donde también los socialistas catalanes estaban convencidos de que ganaban las elecciones.

La diferencia es que aquí no tienen una ERC (Esquerra Republicana de Cataluña) que les preste sus escaños para gobernar y aunque confían en el PIL, -ya lo han dicho incluso a nivel regional-, está por ver si el PIL con su actual infraestructura, sin la presencia de Dimas Martín, que para esa fecha probablemente estará cumpliendo condena en la cárcel de Tachiche y con todos sus cargos públicos como cabeza de lista de CC mantiene los escaños que le dan esas encuestas.

En fin, la ruptura del pacto no es más que la ‘crónica de una muerte anunciada” que se tenía que haber producido mucho antes para no hacer el daño que se ha hecho al Cabildo.