sábado. 20.04.2024

Vaya por delante, para no dar lugar a equivoco, que lo que voy a escribir no es un artículo de opinión sino una reflexión escrita.

No quiero influir, faltaría más, en las conciencias de los posibles lectores, sino que intento darme a mí mismo una explicación medianamente lógica y razonable a lo que está sucediendo en nuestro país después del 26J y los intentos que llevan a cabo los políticos patrios para justificar la NO posibilidad de gobernar España.

El escenario salido de las urnas en las pasadas elecciones deja un escenario tan sumamente retorcido que hace imposible que los encargados de llevar a cabo la gobernabilidad del país, ni sean capaces de ponerse de acuerdo ni tampoco de dejar que la lógica parlamentaria se imponga.

Parto de la base de que la altura política no se mide en centímetros físicos, que sobran en algunos candidatos, sino de la cantidad y calidad de las neuronas que amueblan sus cerebros, muy escasa por lo que estoy viendo diariamente.

Para mí y solo según mi limitado conocimiento de la política y sus diferentes formas de ejercerla, el panorama solo tiene dos salidas, un gobierno presidido por Rajoy en minoría con la abstención del PSOE o nuevas elecciones el 27 de Noviembre.

Cuando Pedro I el Guapo le dice a Mariano II el Tardío que busque sus apoyos para gobernar entre las fuerzas afines a sus planteamientos ideológicos, es decir entre C´S, CC, PNV y los nuevos independentistas del CDC, le está mandando un mensaje muy claro, no vas a poder gobernar. C´S no le quiere a Él como cabeza de gobierno, el PNV no quiere gobernar con un partido, C´S que ya le ha dicho que le quitará su extraordinario Concierto Económico, los de CDC son independentistas y anteponen el referéndum a cualquier otro asunto de interés nacional español y solo cuenta con los nacioalistillos de CC, aunque esto sirve de poco porque con tal de estar, estos pactan hasta con Bob Marley.

Por la derecha va a ser que no.

El pacto de la izquierda, el progresista según ellos, va a ser que tampoco por lo siguiente. Aunque los Picapiedra pudieran llegar, en un hipotético caso, a un acuerdo político, les haría falta el apoyo de los independentistas de BILDU y de ERC. Con estas fuerzas sumarian 167 diputados por lo que necesitarían la abstención de C´S, del PNV y de los nuevos nacionalistas de derechas catalanes. Solo así podrían superar los votos negativos del PP.

En este pacto lo que no cuadra de ninguna de las maneras es que el PSOE se embarque en una aventura política que estaría hipotecada por unas políticas radicalmente contrarias a los postulados nacionales y constitucionalistas que pregonan todos los barones socialistas, ya que tanto BILDU como ERC, el PNV y los nuevos de CDC exigirían el famoso referéndum de independencia de los Paisos Catalans.

Lo único que salvaría este lamentable escenario político seria que el PSOE se diera cuenta que la única salida que le queda, incluso por su propia supervivencia como partido dominante de la izquierda razonable española, es dejar que el PP gobierne en minoría y luego, porque tienen los apoyos suficientes, gobernar ellos desde los escaños del parlamento, ya que con el apoyo de PODEMOS y C´S podrían, sin ningún tipo de problemas, sacar adelante aquellas reformas que les ha causado un sarpullido insoportable, la reforma laboral, la Ley de Educación, la Ley Mordaza y poner en marcha aquellas en las que pudieran ponerse de acuerdo tres fuerzas tan dispares como las que he mencionado.

Si por la derecha no hay forma y por la izquierda no hay manera, el escenario se reduce a un solo acto, elecciones nuevas.

Otra cosa seria, siempre haciéndome eco de las declaraciones de estos altos estadistas que nos representan, que Mariano se tomara las de Villadiego, haciendo un acto de generosidad, tanto a su propio partido como a España, dejando de lado su único argumento válido para mantenerse en el palmito del poder, que es el hecho, innegable, de que ha sido el más votado y como consecuencia de esa Tocata y Fuga de Lolita, Albert el Renovador apoyara con un sí, tanto la investidura como conformar un gobierno juntos. De esta manera, contando con los 169 escaños que supondrían esta alianza, el PSOE no tendría los bemoles suficientes como para votar que no y provocar las nuevas elecciones. Con poner quince gotas de DULCOLAX en el café previo a la votación, de 7 diputados socialistas elegidos al azar, tendríamos gobierno en la segunda votación.

Todo lo demás, lo que estamos viendo diariamente, es marear la perdiz, es seguir pensando que el Luisma es tonto.

De todas formas, no me hagan mucho caso que yo de estas cosas no entiendo nada.

El gallinero nacional
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