Comodidad, buena atención, profesionalidad y agilidad. Esas son las principales ventajas que ofrece la nueva oficina de la Red Tributaria de Lanzarote en Arrecife, ubicada en la trasera del Registro de la Propiedad de la capital de la isla, cerca de la Vía Medular, tal y como han podido constatar los más de 250 ciudadanos que se han acercado ya a estas dependencias a realizar sus consultas o formular las gestiones relacionadas con el abono o la domiciliación de sus obligaciones tributarias, según ha destacado este lunes el Consistorio capitalino en nota de prensa.
El concejal de Economía y Hacienda del Ayuntamiento de Arrecife, Samuel Martín, destaca en su nota “las ventajas y la utilidad de un servicio que descentraliza la Administración Pública para facilitar el cumplimiento de las obligaciones del contribuyente”, y anima a los ciudadanos de la capital a hacer uso de estas dependencias para “ahorrar tiempo de espera y ganar comodidad. Ya no hace falta que se acerque hasta la sede central del Consistorio a pagar sus impuestos, sino que ahora puede hacerlo cómodamente y evitando largas esperas en estas dependencias situadas en un punto geográfico estratégico de la ciudad”.
La Oficina Territorial de Arrecife de la Red Tributaria de Lanzarote se encuentra ubicada, en concreto, en la antigua sede de la Agencia Tributaria Canaria, en la calle Juan Negrín, 101 (esquina Senador Rafael Stinga González), y ofrece atención personalizada al contribuyente de 08.30 a 13.30 horas hasta el próximo 30 de septiembre. A partir de esa fecha, el horario será de 09.00 a 14.00 horas.
Samuel Martín recuerda, asimismo, que existe una oficina virtual para realizar las mismas gestiones abierta las 24 horas de los 365 días del año, www.redtributarialanzarote.es, y agradece, por último, “el esfuerzo y la implicación del personal de la Concejalía de Economía y Hacienda del Ayuntamiento de Arrecife, que se ha involucrado con este nuevo servicio del Cabildo de Lanzarote que, insisto, estoy convencido de que va a simplificar, de forma notable, la realidad tributaria del ciudadano”.
