Gestión del Medio Rural de Canarias, empresa pública adscrita a la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación del Gobierno de Canarias, contará próximamente con nuevas instalaciones en la Isla de Lanzarote, que vendrán a mejorar en unos meses los servicios que presta al sector primario. El inmueble contará con una zona de almacenaje y comercialización, así como un área de oficinas para administración y la división de proyectos de la entidad.
La consejera delegada de GMR Canarias, Águeda Fumero, explicó, tras visitar las obras, que con la nueva sede será posible potenciar la capacidad de comercialización de los productos de la Isla, tal y como habían solicitado agricultores y productores. Este centro hará posible el aumento de la presencia de la división de proyectos, que estará dotada de unas oficinas con los medios necesarios para dar cumplimiento a esta función.
GMR Canarias está aportando, junto a la mejora de instalaciones, un equipo humano de profesionales cualificados -veterinarios, capataces y biólogos, entre otros-, cuya tarea es ofrecer valor añadido a la actividad agropecuaria.
En la actualidad, la empresa desarrolla proyectos en Lanzarote creados y sufragados por los diversos centros directivos de la Consejería, en materias como control lechero e identificación electrónica, los programas nacionales de erradicación de enfermedades animales, la lucha contra el picudo rojo o labores de información en la Reserva Marina.
En el transcurso de su visita a Lanzarote, la consejera delegada de GMR Canarias mantuvo también una reunión con el colectivo de ganaderos que participa voluntariamente en el programa de Control Oficial del Rendimiento Lechero para la Evaluación Genéticas de las especies bovina, ovina y caprina. Asimismo, se efectuó un análisis detallado del proyecto con el fin de dar a conocer los diversos requisitos que afectan al mismo, que cuenta con diez explotaciones ganaderas adscritas.
El objetivo del programa de control lechero es la valoración genética de los reproductores, la mejora genéticas de las razas autóctonas, la elaboración de libros genealógicos y la normalización de las lactaciones. De esta manera, se consigue una cabaña más productiva, con explotaciones más rentables, además de propiciar su identificación electrónica, la venta de reproductores y valorar a los animales sobre la base de datos reales.
Uno de los requisitos del programa es la pertenencia a una agrupación o asociación de ganaderos. Así, se controlan animales de raza pura, debidamente identificados, y es posible disponer de datos obligatorios de las cabezas de ganado.
El programa de control lechero es totalmente voluntario y gratuito, gracias a una iniciativa de la Dirección General de Ganadería del Gobierno de Canarias, que los sufraga íntegramente, a diferencia de lo que ocurre en otras comunidades autónomas, donde es sostenido por los propios ganaderos.
En la actualidad, el equipo profesional que desarrolla este proyecto en toda Canarias está integrado por un veterinario, ocho capataces ganaderos y personal de administración y laboratorio para el análisis de muestras.
