viernes. 29.03.2024

Aunque oficialmente el Gobierno de Canarias ha anunciado que el inicio del curso en la isla de Lanzarote se ha producido sin incidencias de consideración, lo cierto es que existen problemas graves que van saliendo a la luz poco a poco. El último es el que tienen los padres y madres del Colegio de Uga, en el municipio de Yaiza, donde los niños de Segundo de Primaria, de entre 6 y 7 años, han iniciado las clases sin que se les asigne un tutor y en una situación de incertidumbre total.

Los padres y madres, según han explicado a este diario, han agotado todos los "canales burocráticos" para intentar no sólo que les busquen una solución sino que les digan algo, sin haberlo conseguido hasta la fecha. Por eso, tienen intención de presentarse este lunes a las diez de la mañana en la delegación que la Consejería de Educación tiene en Lanzarote para entregar un escrito en el que exigen que se designe el tutor "a la mayor brevedad posible".

"Las consecuencias de tener a nuestros hijos en esta situación son de gran incertidumbre, ya que no sabemos ni siquiera cuándo designarán un profesor a jornada completa para esta clase", explican visiblemente molestos.

Entre las consecuencias de esta insólita situación está que los niños de este curso iniciarán el temario con tres semanas de retraso como mínimo, "si con suerte nombran a alguien la próxima semana". "No podemos comprar los libros para los niños, porque hasta que no tengan un profesor no se sabe cuál será la evaluación que haga de la clase, ni qué libros van a usar", advierten.

Como no se explican muy bien qué es lo que puede estar sucediendo, puesto que nadie les da una justificación que aclare al menos en parte la situación, se plantean varias preguntas: "¿no hay profesores dispuestos?, ¿es una manera de ahorrar dinero?, ¿no han tenido suficiente tiempo considerando que desde julio se sabe la cantidad de alumnos que hay en el centro?"

Están, como es lógico, enojados y frustrados, y piden por tanto a la parte política que dé una explicación y posteriormente una solución a un problema que califican como "incomprensible".

Los niños de 6 y 7 años del Colegio de Uga comienzan el curso sin tutor
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