María Isabel Arrocha, la madre que sigue reclamando el ingreso de su hijo en un centro psiquiátrico de larga duración de Lanzarote, amenaza ahora con encadenarse a las puertas del Cabildo y de la Dirección del Área de Salud de Lanzarote y denuncia que el pasado sábado al mediodía su hijo se intentó suicidar tomándose más de 100 pastillas de su propia medicación diaria.
Arrocha ha remitido un escrito a este diario asegurando que a pedido ayuda a la nueva consejera de Bienestar Social del Cabildo, Lucía Tejera quien, según la versión de esta madre, le dijo que le llamaría entre el lunes o el martes de esta semana. "Aún no he recibido llamada. Solo deseo que pronto puedan internarlo porque de no ser así el final puede ser muy trágico y muy triste", advierte esta madre. "Son muchas las denuncias que he puesto a mi propio hijo, incluso por poner en riesgo mi integridad física", recuerda Arrocha.
Según el relato de María Isabel, "no hay puerta que no haya tocado para que internen de una vez por todas a mi hijo en un centro psiquiátrico de larga duración". Por ello, advierte de que "si no hay pronto una solución, llevaré a cabo mi amenaza de encadenarme a las puertas del Cabildo y delante de la oficina del director insular de Sanidad [José Brito] porque no me han dado otra solución, solo largas y largas".
"Son muchas las veces que mi hijo me ha dicho que quiere quitarse la vida para no hacer sufrir más a su madre porque como dice él, “yo no controlo mi cabeza mama, yo solo quiero desaparecer de este mundo para que tu vivas tranquila”, expone esta madre desesperada.
