Los vertidos de la unidad de bombeo intermedia de aguas residuales situada al lado de la urbanización Marcastell de Playa Blanca, se habían convertido en un problema recurrente en los últimos años, pero la intervención de Aguas Filtradas la semana pasada, sustituyendo una de las bombas de impulsión por otra de mayor potencia ante solicitud del Ayuntamiento de Yaiza, pone coto a dicha preocupación. Así, la subcontrata de Inalsa, con esta encomienda, refuerza las bombas que funcionan en la referida impulsión, cuya capacidad de bombeo estaba siendo insuficiente por el significativo aumento del caudal de aguas negras en el sur de la Isla. Desde hace al menos diez días la zona presenta un aspecto diferente, a falta de cubrir la tierra con picón para reforzar el saneado del suelo. Para la ejecución de este y otros proyectos, el Ayuntamiento reconoce el compromiso y la disposición del consejero de Obras Públicas del Cabildo, Sergio Machín.
Además de la sustitución de la bomba, según fuentes municipales, se procedió al achicado de las aguas vertidas y al baldeo con agua limpia y desinfectante de los terrenos circundantes. Asimismo se aportó tierra de relleno para sanear la zona y evitar la formación de charcos en el futuro.
Pendiente de ejecución está un nuevo proyecto promovido por el Consejo Insular de Aguas, en fase de licitación, en el cual se prevé reponer totalmente las tuberías de impulsión de la unidad de bombeo, bastante deterioradas, las válvulas de compuerta y retención, muy desgastadas, instalar una bomba agitadora de grasas que evite la formación de residuos que puedan atascar las bombas, e instalar un nuevo equipo de telealarma con telecontrol continuo y registro de datos como caudales de entrada y salida, nivel del agua, número de bombas operativas o fuera de servicio, consumos eléctricos, entre otras acciones. Las aguas fecales que pasan por la unidad próxima a Marcastell van a parar a la estación depuradora de aguas residuales localizada al lado del punto limpio, en la vía que de Playa Blanca conduce a Femés.
El Ayuntamiento de Yaiza espera que la ejecución de este proyecto mejore la seguridad de funcionamiento de la red de impulsiones de aguas residuales minimizando los incidentes y averías en Playa Blanca. En todo caso, el Consistorio continúa trabajando conjuntamente con el personal de la empresa que gestiona las redes al objeto de corregir las posibles deficiencias que se pudieran detectar en un futuro.
