Que no se vuelva a repetir

2006, un año perdido que ha estado fuertemente marcado por la inestabilidad de las instituciones públicas y la incapacidad de los políticos para resolver aquellas cuestiones que verdaderamente preocupan a los ciudadanos de la Isla. Así definían la mayoría de nuestros colegas al año que termina en Lanzarote. Y es así, los gestores públicos no han sabido sacar adelante proyectos de vital importancia para Lanzarote como el Plan Territorial Especial (PTE), que sigue a la espera de que la Consejería de Medio Ambiente del Gobierno de Canarias haga el famoso informe medioambiental y el Plan General de Ordenación Urbana de Arrecife (PGOU), que a pesar del empeño de los actuales dirigentes del Ayuntamiento de Arrecife de sacarlo antes de que concluya esta legislatura, desde el PSC se insiste en que no es conveniente y que incluso perjudicaría a la propia corporación.

Pero es que echando un vistazo al reportaje hecho por nuestro compañero Ricardo Jordán sobre lo ocurrido durante el año que dejamos hace menos de una semana, podemos comprobar que los problemas en la Isla y en el resto del país siguen enquistados, de tal manera que cerrábamos el año con 24 muertos en las carreteras insulares y ocho fallecidas más por violencia de género. A pesar de la entrada en vigor del carnet por puntos y del aumento de los controles de alcoholemia por parte de la Guardia Civil de tráfico, día sí, día no, nos despertamos con un accidente de tráfico en nuestras carreteras. Este viernes sin ir más lejos conocíamos la noticia de un nuevo accidente que ha dejado una persona grave en las carreteras de Tías por un vuelco en su vehículo. Y qué decir de las mujeres muertas a manos de sus parejas o ex parejas, pues que seguimos igual y que tenemos que continuar luchando para que esto no continúe sucediendo en nuestra sociedad.

Pero siguiendo con el anuario realizado por nuestro compañero de Crónicas nos topamos con el anuncio de alto el fuego permanente de ETA del pasado mes de marzo y que ha sido roto precisamente estos primeros días del año con el atentado en la T4 de Madrid. Un atentado que aparte de numerosos destrozos, dejaba los primeros dos muertos del año por atentado. ¡Qué falacia la de ETA!. La tregua no pasó de los nueve meses, pero lo más grave es que parece que nunca existió como se ha demostrado en estos días en los que ha aparecido numeroso material explosivo que la banda terrorista tenía escondido en diverzos zulos. Un problema grave que requiere de la unión de todas las fuerzas políticas porque al fin y al cabo nos afecta a todos los españoles.

Volviendo a Lanzarote, no cabe duda de que el año nos ha traído muchas cosas, entre ellas algunas positivas, cómo no. La constitución oficial por fin de una Cámara de Comercio de Lanzarote, de la que esperamos mucho, fue una buena noticia; la aprobación de algunos planes generales importantes para los municipios como el de Haría, o el avance de San Bartolomé, la visita de Sus Majestades Los Reyes de España, la puesta en marcha de la Sociedad de Promoción del Turismo o las vacaciones en la Isla por segunda vez de nuestro presidente Zapatero. Sin embargo, estas noticias han estado mediatizadas por la crispación que ha existido en nuestras corporaciones, sobre todo en el Cabildo y en el Ayuntamiento de Arrecife, y que ha afectado al desarrollo de esos planes tan importantes para la Isla y que seguramente se quedarán en las gavetas de las mesas de los despachos de los actuales gobernantes a la espera de que la nueva corporación decida desempolvarlos o prescindir de ellos y realizar otros nuevos con el gasto que ello supondría.

Hace menos de una semana empezó un nuevo año marcado claramente por las elecciones autonómicas y municipales que se celebrarán el día 27 de mayo, esperemos que después de pasar medio año de campaña electoral, porque no será otra cosa, tal como estamos comprobamos diariamente, Lanzarote consiga tener un Cabildo fuerte y sólido, que aguante toda la legislatura y que proteja efectivamente el territorio y que traiga beneficios para la Isla, así como ayuntamientos comprometidos para que todos juntos podamos conseguir lo mejor para esta isla oriental. Anoche llegaron los reyes magos a Lanzarote y con ellos la ilusión y la esperanza. Esta mañana iré al zapato a ver si me trajeron esas dosis de compromiso que pedí a los reyes para que no se vuelvan a repetirse años como el vivido en 2006 y que por fin logremos concienciarnos todos de que Lanzarote tiene que avanzar y que lo importante son las actuaciones en la Isla y no los beneficios propios de partidos y personas. Esperemos que así sea.