viernes. 29.03.2024

Desde el inicio de la actual legislatura en el Senado que apenas legisla (mes de abril del pasado y pesado 2008), los 8 senadores canarios del PSOE han presentado en la Cámara Alta diez iniciativas. 10, que se dice pronto y fácil. Y eso entre todos ellos. Extenuante cifra, a fe mía. Prueba evidente y palmaria de que se ganan, de largo, el buen sueldo que les pagamos.

No me invento los datos. Aparecen en la página digital y oficial del propio Senado. Ahí se recoge toda la actividad -la que se ha desarrollado y la que no- por parte de los senadores en la presente legislatura, que hace ya la número nueve (IX) desde el inicio del actual régimen dizque democrático (y yo soy astronauta en mi tiempo libre).

Uno de esos 8 senadores canarios lidera la lista de los más vagos (o menos activos, por decirlo de forma más diplomática). Se trata de Casimiro Curbelo Curbelo, senador por La Gomera, y presidente a la sazón del Cabildo de la hermosa isla colombina. Pero no está solo en ese rincón del ocio, puesto que lo acompañan otros correligionarios canarios que tampoco han presentado ninguna iniciativa en el Senado, rebautizados como los del Trío Tranquilón: Aurelio Abreu (Tenerife), Saturnina Santana (Gran Canaria) y Marcos Francisco Hernández (Marquitos para los amigos y demás personas piadosas), que dicen que sigue siendo el senador por Lanzarote, y además en segundo sueño (mandato, quise decir) consecutivo.

Si aceptamos la convención de que el Senado no vale para nada, convendrán conmigo en que algunos senadores valen menos que nada, pues nada de nada hacen por nadie, excepto por sí mismos y sus respectivos bolsillos.

Nuestro teórico representante y valedor (no se me ría nadie, que un respetito es muy bonito) en la Cámara Alta lleva ya legislatura y media sesteando en Madrid, en nuestro nombre y a nuestra cuenta, aunque su cuenta de resultados es la que refleja la propia página digital del Senado: cero batatero.

¿Se imagina alguien a un potencial votante lanzaroteño votando para el Senado a quien sabe que no ha movido un dedo por su isla en todos estos últimos años? ¿Y cómo es que sale incluso reelegido? Misterios del “efecto ZP”, de las listas cerradas y de la evidencia de una farsa de democracia trocada/trucada en simple o simplona partitocracia en la que todavía creen algunos... sobre todo, los que le sacan partido al Partido.

NOTA AL MARGEN (o no tan al margen): ¡Vota por tu dignidad: abstente de votar! ([email protected]).

Senador, vela por nosotros
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