La ausencia de flora reduce la incidencia de alergia a valores mínimos

Acn

La llegada de la primavera suele suponer una de las peores épocas del año para los alérgicos. La causa suele estar en el polen de las flores que en estas fechas se encuentra en el aire. Sin embargo, en el caso de Lanzarote la ausencia de flora en grandes concentraciones hace que los niveles de alergia sean mínimos en comparación con otros lugares.

“Lanzarote es una isla que como en principio no tiene mucha flora, no hay grandes jardines ni grandes zonas de vegetación el tema de la primavera no tiene una incidencia tan fuerte como en otros sitios”, explicó Juan Manuel Sosa, director insular de salud.

Sin embargo, hay un elemento que eleva en cierta forma la incidencia de la alergia. Se trata de la calima, un fenómeno meteorológico que no sólo trae polvo en suspensión. De hecho, al proceder de otras zonas, suele venir acompañado por pólenes de otros lugares que pueden afectar a los habitantes de la Isla.

En este sentido, los síntomas más frecuentes son tos, estornudos o dificultad para respirar. No obstante, el hecho de vivir rodeados de mar hace que estos indicares se suavicen.

A pesar de la baja incidencia se recomienda que ante estos síntomas se acuda al médico para determinar si es o no alergia. En caso de ser así será el profesional el que establezca el tratamiento y aconseje al paciente sobre algunas pautas para disminuir las molestias en la medida de lo posible.