El turismo internacional se desploma y se confirma la dramática situación del sector en España
- Ante este panorama, CEHAT demanda la implantación de medidas concretas y de máxima urgencia para la no destrucción de empleo y la definitiva desaparición de miles de empresas turísticas
- Los presidentes de Ashotel, FEHT, FTL y Asofuer comparecen en la Cámara regional para pedir unidad de acción a los grupos políticos y aseguran que “sin turismo Canarias no tiene futuro”
Acceso Estadística de Movimientos Turísticos en Fronteras (FRONTUR)
Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), obtenidos a través de la Estadística de Movimientos Turísticos en Fronteras (FRONTUR), España ha recibido durante el mes de julio un 75% menos de turistas internacionales que los que se registraron en el mismo periodo del año pasado. Así, en julio de 2020 han visitado nuestro país 2,5 millones visitantes extranjeros.
Analizados los datos de julio, el INE apunta que, en términos generales, durante los siete primeros meses de 2020, el número de turistas que visitan España ha disminuido en total un 72,4% y se han registrado unos 13,2 millones de personas.
Los principales países emisores en lo que va de año son Reino Unido (por encima de 2,4 millones de turistas y un descenso del 76,9% respecto a los siete primeros meses de 2019), Francia (con más de 2,0 millones, y una bajada del 67,2%) y Alemania (con casi 1,8 millones de turistas, un 72,9% menos).
El descenso de turistas internacionales registrado ha supuesto un gran impacto en el sector alojativo español, puesto que el alojamiento hotelero ha bajado un 82,3% en tasa anual y la vivienda en alquiler, un 69,9%, tal y como apunta el INE. Estos datos confirman que la disminución sólo ha sido la mitad para aquellos que han venido a viviendas de amigos o vivienda en propiedad, donde posiblemente se encuadren aquellos usuarios de oferta ilegal y clandestina, que es urgente ordenar por el impacto negativo que genera ante la competencia de los que cumplen toda la normativa.
Es importante destacar la caída cercana al 90% de los paquetes turísticos de los que dependen muchas zonas y mercados y que son los que ponen operaciones aéreas entre ciudades secundarias de los países emisores directamente a las zonas turísticas. La caída del paquete turístico tiene una incidencia dramática en el turismo vacacional del que dependen millones de empleos.
No ha habido zonas que hayan destacado en la llegada de turistas extranjeros, si exceptuamos pasos fronterizos en carretera o ciudades limítrofes con Francia, ya que ciudades como Madrid y Barcelona, los destinos turísticos de sol y playa y aquellas zonas de interior que habían apostado por el turismo extranjero se han visto especialmente afectadas.
Ante este desplome del turismo internacional, la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (CEHAT) insiste en la necesidad de establecer urgentemente medidas que garanticen la supervivencia del sector turístico.
En este sentido, Jorge Marichal, presidente de CEHAT, subraya que “la situación que vivimos es muy clara: tenemos un paciente −el turismo−, que está en la UVI, afectado por COVID-19; está sedado con los ERTE, se le ha aplicado cierto tratamiento de choque, pero no puede seguir sedado, tiene que salir adelante. Por eso, debemos en primer lugar controlar la curva de contagios y, una vez hecho esto, aplicar medidas muy concretas: controles sanitarios en los aeropuertos, confección de ERTE flexibles adaptados de forma específica a la distinta casuística que viven las empresas del sector, la creación de una comisión interministerial, pues hay muchos ministerios que deben tomar medidas en sus áreas de actuación, coordinación con las comunidades autónomas y la toma de medidas en sus áreas de competencia, adopción de medidas fiscales que permitan la apertura de empresas con baja demanda y el resto de soluciones que han tomado muchos países de nuestro entorno, donde el turismo no es su prioridad, pero que permiten la supervivencia coyuntural hasta que desaparezca la crisis de confianza. España no se puede permitir el lujo de ver destruir el empleo y el tejido productivo, de forma definitiva”.
CEHAT subraya así que es necesario sacar al turismo del debate político partidista y reclama unidad de acción entre todas las administraciones, la sociedad civil y los partidos políticos para ser capaces de afrontar este periodo coyuntural sin daños irreversibles.
“No hay plan B”, aseguran las patronales turísticas al Parlamento
Los presidentes y presidenta de las patronales turísticas de Canarias −Ashotel, FEHT, Federación Turística de Lanzarote (FTL) y Asofuer−, Jorge Marichal, José María Mañaricúa, Susana Pérez y Antonio Hormiga, respectivamente, comparecieron esta mañana en la Comisión de Turismo, Industria y Comercio del Parlamento de Canarias para exponer la grave situación que atraviesa el principal sector económico de las Islas y urgir la puesta en marcha de un plan específico y elaborado ‘ad hoc’ para el sector y evitar que caiga. “No hay plan B”, aseguraron los representantes empresariales a preguntas de una diputada. Los presidentes de las patronales afirmaron en sus intervenciones que de no actuar urgentemente “muchos de los ERTE se convertirán en ERE y estos, a su vez, en cierres empresariales”, y que se corre el riesgo de que la tasa de paro en las Islas alcance este invierno el 40%. “A ver qué plan del Gobierno puede gestionar esa cifra de paro”, se preguntaron. Antes de sus intervenciones, los cuatro agradecieron a la Comisión la posibilidad de estar allí hoy exponiendo la situación y tratando de crear unidad de acción para salvar al sector que hoy día genera el 35% PIB (hasta el 60% directo e indirecto) y el 40% del empleo en el Archipiélago.
Marichal, también presidente de la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (CEHAT), fue el primero en intervenir para exponer qué puede suceder si no se actúa ya, antes de la llegada de la temporada de invierno. “No hemos venido aquí a buscar culpables, sino a sumar esfuerzos y plantear medidas que entendemos debemos sacar adelante”, afirmó. La situación se complica mucho más cada día que pasa, dijo Marichal, quien indicó que actualmente la planta hotelera abierta en la provincia tinerfeña está en torno al 25% “y si Alemania decide hoy o mañana vetarnos nos veremos con un cero turístico de nuevo en los próximos días”, añadió. “Queremos que de esta comisión salgan propuestas para recuperar la senda de la actividad turística”, comentó.
“La situación que vivimos es muy clara: tenemos un paciente −el turismo−, que está en la UVI, afectado por COVID-19; está sedado con los ERTE, se le ha aplicado cierto tratamiento de choque, pero no puede seguir sedado, tiene que salir adelante. Por eso, debemos en primer lugar controlar la curva de contagios y, una vez hecho esto, aplicar medidas muy concretas: controles sanitarios en los aeropuertos y confección de ERTE flexibles adaptados de forma específica a la distinta casuística que viven las empresas del sector, que es muy variada”, explicó Marichal, quien insistió a los representantes de los grupos parlamentarios en “dejar el turismo fuera de la política”.
Susana Pérez comentó que la crisis sanitaria trajo situación inédita a la industria turística, “con repatriaciones masivas y cierre total de nuestros establecimientos, unos hechos sin precedente para el sector turístico, un escenario inimaginable que ha puesto en jaque al motor económico del Archipiélago”. Pérez destacó el esfuerzo enorme realizado por las patronales junto al Gobierno de Canarias para preparar la reapertura en los meses de mayo y junio con el Plan Canarias Fortaleza, así como el trabajo ímprobo de las empresas para adaptarse a las nuevas medidas sanitarias y formar a su personal. “Sabemos que el Gobierno planteaba ya esos controles sanitarios en origen y destino para lograr la confianza de nuestros países emisores, pero lo cierto es que seguimos sin conseguirlo, mientras a nuestro alrededor vemos cómo Madeira o Chipre los implantan y logran corredores seguros con Reino Unido”, explicó. “Tenemos que colocarnos de nuevo en la parrilla de salida y para ello necesitamos controles sanitarios a los pasajeros”, añadió.
Finalmente, Antonio Hormiga incidió en que Canarias vive “la peor” situación económica y social de todos los tiempos. “La incertidumbre de nuestro principal sector es absoluta, la incidencia de la enfermedad empeora y el escenario es cada día más gris”, dijo Hormiga, quien aseguró que “no caben intereses particulares ni partidistas y que es necesario un esfuerzo común”. El mensaje, repitió, está muy claro: corredores seguros, test en entrada y salida, ERTE flexibles… “En Fuerteventura la situación es bastante complicada, porque la dependencia del turismo es absoluta, con un 70% del PIB de la isla”, informó el dirigente empresarial majorero, quien instó a los representantes políticos a hacer suyo el lema de Asofuer, “open mind, mentes abiertas, colaborativas, creativas, que nos permitan recuperar el sector”. Por eso, añadió, “reclamamos lealtad a todas las instituciones y colaboración para poder salir adelante de forma urgente”.
Por parte de los grupos parlamentarios, intervinieron en el siguiente orden Ricardo Fernández de la Puente (grupo mixto – Ciudadanos), Jesús Ramos (grupo Agrupación Socialista Gomera), Francisco Déniz (grupo Sí Podemos Canarias), Esther González (grupo Nueva Canarias), Australia Navarro (grupo Popular), Nereida Calero (grupo Nacionalista Canario) e Iñaki Álvaro Lavandera (grupo Socialista Canario).