¿VOLVEMOS A LAS ANDADAS?

Con la llegada del nuevo grupo de gobierno del Cabildo se nos prometió a nosotros y se le prometió a toda la isla de Lanzarote que iban a cambiar las cosas, que iba a cambiar sobre todo el modo de hacer política. Criticaron tanto desde el Partido Socialista Canario (PSC) y desde el Partido de Independientes de Lanzarote (PIL) a Coalición Canaria (CC) que llegamos a creerlo. Sin embargo, este martes volvimos a tener un claro ejemplo de que se regresa al peor pasado de los posibles, a ese que tiene que ver con el interesado y antojado tráfico de información. Una vez más, y van muchas, se le dio la información sobre una resolución firmada por la nueva presidenta, Manuela Armas (en la época de Inés Rojas como presidenta también fue una constante de la que nos quejamos sin que nuestras palabras tuvieran ningún eco), sobre un caso que tiene que ver con los servicios jurídicos y el importante Área de Política Territorial y Medio Ambiente. Nos referimos a la información vinculada con un nuevo pleito contra el Ayuntamiento de Yaiza, en el que curiosamente se trata de implicar al portavoz del Partido Nacionalista de Lanzarote (PNL) en Arrecife, Pedro de Armas. Lamentable, muy lamentable. Todavía recordamos que fue la propia Manuela Armas la que nos aseguró que este tipo de informaciones se iban a abordar con absoluto tacto y con equidad, si no dando a conocer cada decisión vinculada con el territorio y los tribunales de justicia a través de una rueda de prensa sí a través de notas que llegarían a todo el mundo a la vez. Ya vemos que a las primeras de cambio esto no se cumple. Queremos creer, porque todavía confiamos en la presidenta y en su palabra, que alguien le ha colado un gol en fuera de juego. Sospechamos que el mismo o los mismos de siempre. Si es así, no estaría mal que lo aclarara de forma inmediata, como estaría bien que también lo aclarara a sus socios de gobierno, a los que nos consta que no les hace demasiada gracia que se inicie el periodo de las filtraciones interesadas y de las escoras descaradas hacia ciertos medios. Casualmente, siempre los mismos.