Una funcionaria del Servicio Canario de Salud tramitará a los interesados “Manifestaciones Anticipadas de Voluntad” en la Casa Cerdeña

• Personal sanitario acreditado por el Hospital Doctor José Molina Orosa,  que en este caso prestará el servicio en la Casa Cerdeña de manera gratuita y sencilla estará disponible. Se cumplimenta el documento, se registra y queda incorporado a la historia clínica de Atención Primaria, Hospitalaria y en el Registro Estatal de Voluntades Anticipadas

El alcalde de San Bartolomé, Alexis Tejera, la directora del Área de Salud de Lanzarote, Noelia Umpiérrez, la geriatra Elisa Corujo, la funcionaria que estará al frente del Servicio  'Manifestaciones Anticipadas de Voluntad' (MAV), Victoria Castañeyra Góngora, el concejal de Sanidad del Ayuntamiento de San Bartolomé, Raúl de León, e Isidro Pérez, edil responsable del Servicio de Atención a la Emergencia Alimentaria, han presentado este nuevo servicio adherido al Servicio Canario de Salud, que contará con una oficina en la Casa Cerdeña para atender a los interesados e interesadas. 

Bajo el lema “Todos podemos decidir el final de nuestra vida”, cada ciudadano puede dejar firmado en un documento legal las Manifestaciones Anticipadas de Volundad, que son las instrucciones legales que una persona quiere que se cumplan por el personal sanitario encargado de su cuidado, cuando ya no pueda expresar su consentimiento sobre actos médicos que se deban practicar. En nuestras manos está decidir sobre el proceso de forma consciente y libre mientras estamos capacitados, sin necesidad que sean otros, como el personal o nuestros familiares quienes tomen la decisión.

Para decidirlo, tenemos a nuestra disposición un documento llamado Manifestaciones Anticipadas de Voluntad (MAV), en el que la persona, mayor de edad, manifiesta anticipadamente su voluntad sobre cuidados y tratamientos que desea recibir, o rechazar, cuanto esté en situación terminal y no pueda comunicarse.

El Ayuntamiento explica en nota de prensa que se puede expresar en este documento la decisión de no prolongar la vida artificialmente y el deseo de paliar al máximo el malestar,  el sufrimiento  psíquico  y físico causado por la enfermedad a través de fármacos y también se puede formular la voluntad de convertirse en donante de órganos para trasplantes que ayuden a salvar vidas. Con la firma de este documento se libera a los familiares de tomar decisiones cruciales en momentos críticos.