Elena Solís, consejera de Medio Ambiente del Cabildo de Lanzarote

“Voy a poner balizas en toda la parte de las dunas de Famara para que los coches y las caravanas no puedan aparcar”

Elena Solís, consejera de Medio Ambiente, Reserva de la Biosfera, Soberanía Alimentaria, Paisaje y Bienestar Animal del Cabildo de Lanzarote.

“Intentaré sellar algunos usos de los espacios naturales para que no haya abuso por ignorancia o por otras razones”

 “Hay voluntad de coordinar Medio Ambiente con Planificación Territorial”

“Una de mis principales funciones es la gestión de los espacios naturales y en ese sentido, tengo una responsabilidad enorme”

La nueva consejera de Medio Ambiente, Reserva de la Biosfera, Soberanía Alimentaria, Paisaje y Bienestar Animal del Cabildo de Lanzarote, Elena Solís, llega con ganas de diálogo, de consulta a la ciudadanía y de luchar contra la lentitud de la Administración a la hora de solucionar los problemas. En el programa “A Buena Hora” de Crónicas Radio – Cadena Cope reconoció la sorpresa que le produjo que Podemos le propusiera, siendo como es independiente y no militante en la organización, para ocupar el cargo de consejera no electa. Sin embargo, superada esa sorprensa, tiene claro que hay que trabajar con rapidez y diligencia y afirma que ya está metida en faena y poniéndose en contacto con todos los agentes implicados en la preservación de los espacios naturales de la Isla. Aunque su competencia no implica la planificación, sí cuenta con una colaboración fluida entre las áreas de Medio Ambiente y Planificación Territorial para abordar herramientas tan importantes como el Plan Insular, que lleva décadas por diferentes motivos durmiendo el sueño de los justos. Famara, el Volcán del Cuervo o Los Hervideros serán algunos de sus primeros objetivos y confía en contar con la ayuda de las instituciones que puedan aportar soluciones para el cuidado del territorio.

- Acaba de entrar en un Gobierno que no tiene las cosas fáciles en este momento. ¿Cómo lo afronta?

- No es fácil pero a las personas activistas que nos hemos dedicado al medio ambiente nos parece que es una oportunidad de oro y queremos aprovechar al máximo el tiempo de la corta legislatura que tenemos por delante. Queremos hacer el máximo bien posible a este territorio tan maravilloso.

- Usted no está afiliada a Podemos. Ha llamado la atención que este partido haya confiado en alguien independiente…

- Me sorprendió cuando me ofrecieron el cargo porque yo conocía a los directivos de Podemos y tenía relación con ellos a nivel de ecologismo activista en la Isla desde hacía tiempo. Ellos conocían mi trabajo y consideraron que era la mejor persona para ocupar ese puesto. No me lo esperaba y me costó trabajo decidirme porque la política es algo en lo que nunca pensé que me iba a involucrar. Considero que es una oportunidad muy importante y una oportunidad de ver si una persona cien por cien independiente puede hacer realmente algo por el bien de la isla y su gente. Suena idílico pero es la realidad.

- Son los políticos los que realmente pueden hacer algo…

- Si tenemos grupos de participación fuertes a todos los niveles, el capitalismo tradicional está en riesgo porque las nuevas tendencias de los sistemas económicos son tan sumamente caníbales que provocan que tengamos que respetar a los sectores tradicionales como puede ser el turismo o la pesca. El sistema productivo ha sido amenazado como el caso de las piscifactorías que nos quieren implantar en toda la costa este. Es un caso típico donde tienes una economía financializada ya que las piscifactorías son fondos de inversiones y gente sin cabeza que se quiere imponer a otro sector que es el que nos ha dado de comer toda la vida, el turismo y la pesca.

- Usted ha hablado del Volcán del Cuervo y las excesivas excursiones que se están haciendo. ¿Cómo cree que está en este momento la defensa de un territorio tan frágil como Lanzarote?

- Me preocupa bastante. Puse el ejemplo del Volcán del Cuervo pero eso se replica también en Famara, donde hay una sobrecarga enorme porque no hay facilidades ni campings y la gente se acumula en la carretera del Papelillo y eso es insoportable. Para seguir teniendo éxito tenemos que poner ciertos límites a esa carta turística. No se trata de no querer turismo; es que para seguir aprovechándonos del recurso territorial, que es esencial en Lanzarote, tenemos que preservarlo un poquito. Yo tomé posesión el viernes y una de las primeras cosas que voy a hacer esta semana es intentar ver qué podemos hacer con aquellas zonas frágiles como Los Hervideros, donde también hay mucha erosión del mar y es peligroso que los turistas se asomen a los balcones. Una de mis principales funciones es la gestión de los espacios naturales y en ese sentido, tengo una responsabilidad enorme.

- Por muchas razones, el Plan Insular no se ha desarrollado como la herramienta básica que tendría que ser. ¿Sacar ese Plan será uno de sus principales antes de que acabe este mandato?

- Sí. Dentro de mis funciones directas no está la planificación pero en el pacto exigimos y hay bastante colaboración y voluntad, de coordinar Medio Ambiente con Planificación Territorial y tengo toda la confianza. Lo que pasa es que voy a estar un año y medio escaso. Ya he hablado con Planificación Territorial para poner una serie de cuestiones sobre la mesa y están trabajando en ello. La planificación es un sistema muy lento y para mí es complicado sacar planificación pero al menos intentaré sellar algunos usos de los espacios naturales de tal manera que no haya abuso por ignorancia o por otras razones.

- ¿Cree que va a ser complicado controlar una zona tan grande como Famara?

- Sí. A mí ya me han instruido en cuáles son los problemas ahí y uno de esos problemas es que hay cuatro instituciones implicadas; Costas, el Ayuntamiento de Teguise, el Gobierno de Canarias y el Cabildo de Lanzarote. Famara es parte del Archipiélago Chinijo y ya ha habido reuniones pero lo que yo quiero hacer es que volvamos a sentarnos para ver qué soluciones hay. Leyendo la nota de Ecologistas en Acción vemos que hay que limitar de alguna manera el tránsito en la pista del Papelillo, que va paralela al mar, y donde se aparca y por supuesto, la parte de Los Noruegos y ver si hay que limitarlo total o parcialmente. Eso es algo que tenemos que estudiar. Una cosa que ya voy a hacer y ya he contactado con la Universidad de Gran Canaria es un estudio sobre cargas. Yo no puedo hacer nada sin estar avalada por un estudio pero esto es lentísimo. Yo no estoy acostumbrada a la Administración pero lo intentaré hacer lo más rápido posible. Una vez que tenga el estudio de carga turística de Famara, el siguiente paso será juntarnos todos y decidir si hay que hacer un camping o alguna restricción. Habrá que poner facilidades para que la gente no vaya la baño a las dunas. Otra cosa que voy a hacer ya porque los presupuestos no se van a aprobar es poner balizas en toda la parte de las dunas de manera que los coches y las caravanas no puedan aparcar. Es complejo pero pido la colaboración de todas las demás instituciones, sobre todo del Ayuntamiento de Teguise, que tiene ciertas potestades. Con Costas hablaré este martes y con el resto, a lo largo de la semana porque hay que solucionar ese problema.

- Tendrá que tener paciencia con la lentitud de la Administración…

- Voy a hacer yoga por las mañanas (risas). Cuando estás fuera no te das cuenta de lo lento que es. Un político que toma decisiones necesita estar avalado. Ya tengo todos los contactos de las personas que viven en Los Noruegos, en Caleta de Famara y quiero ver cómo pueden afectarles o a los surfistas las medidas que vayamos a tomar y qué medidas quieren ellos. Eso para mí es lo más importante.