Torneo de San Ginés
Este año se lo han trabajado un poquito más, aunque la teórica responsable/organizadora (la ya dimitida concejal de Deportes), se marchó justo en las vísperas de la nueva edición del antiguamente afamado Torneo de Fútbol de San Ginés, que en este agosto de 2008 ha traído hasta el césped artificial de la Ciudad Deportiva, aparte de a una agónica UD Lanzarote que a punto estuvo de no disputarlo por extinción, al Éibar, la UD Las Palmas y el Barcelona B, que para mí tiene más atractivo que el Real Madrid A, como de aquí a Pekín. Aunque parezca ser la máxima del actual equipo de (des)Gobierno del Ayuntamiento de Arrecife, no todo se puede hacer mal, ni queriendo.
Verdad es también, puestos a contarlo todo, que cualquier mejora, por mínima que sea, destaca todavía más cuando la tónica de los últimos años del Torneo/Trofeo futbolístico había asumido el otro lema del “cuanto peor, mejor”, y su prestigio había venido cayendo en picado en sus más recientes ediciones anteriores, como es triste fama, coincidiendo con el declive político que se padece en Arrecife y en el resto de esta pobre islita rica sin gobierno conocido... hasta llegar a la recordada (por maldita) edición invisible de 2005, que marcó el récord del desastre organizativo, allá cuando el entonces concejal de Deportes del Ayuntamiento de la caos-pital conejera, el tal Luis Morales, declaró en público que la noticia principal del Torneo de aquel año es que no habría Torneo.
Si ustedes se fijan un pizco, desde que se inició el siglo XXI, el histórico Torneo de Fútbol de San Ginés ha estado siempre muy acorde con las fiestas capitalinas, porque ha venido siendo en estos últimos años un fracaso absoluto de organización, de participación y de convocatoria (o sea, de público). Si los “sangineles” -un suponer- de 2001 están considerados como los más malos y sosos que se habían gozado/sufrido hasta entonces, las ediciones posteriores han logrando sucesivamente “el más difícil todavía” y, como el que rompe marcas o registros en los actuales Juegos Olímpicos chinos, han ido superando, de largo, aquella triste marca... y bajando, como la participación electoral.
En hablando de desastres organizativos, recuérdese no más cuando a los "responsables" del vapuleado Torneo futbolístico les dio hace unos años, en muy mala hora, por inventarse aquel inmenso disparate, burla o estafa al aficionado en forma de final “a tiempo parcial”, disputándose así el tercer y cuarto puesto al mediodía de un caluroso domingo de agosto y la final propiamente dicha en la tarde-noche de ese mismo día. Como si no fuera suficiente burla la modestísima categoría de los equipos presentes en aquel triste cuadrangular de mal recuerdo...
Este Torneo San Ginés de 2008 no tiene mal cartel, para mi gusto. A la precisa hora en la que redacto esta columna (tardecita del viernes), la UD Lanzarote ya ha logrado clasificarse para jugar la final, luego de vencer al Éibar (1-0). Igual va y resulta que el mismo año que estuvo a punto de morir es el que aprovecha el equipito y máximo representante balompédico insular para resucitar “como el Ave César”, que diría un concejal de Cultura que yo me sé. Amén. (de-leon@ya.com).