Alternativa advierte que gravar la actividad de los ventorrillos supondrá la decadencia total de los mismos como ya sucedió en 2002
Los concejales del Ayuntamiento de Arrecife, Andrés Barreto Concepción y Ginés de Quintana Cabrera, en representación de Alternativa Ciudadana 25 de mayo, han hecho públicas las alegaciones que su formación política ha presentado a la “Ordenanza Reguladora de la Tasa por Ocupación o Aprovechamiento Especial de la Vía Pública con Puestos, Barracas, Casetas de Ventas, Puestos de Mercado Semanal o Periódicos, Espectáculos o Atracciones e Industrias Callejeras y Ambulantes”. En este sentido, hacen referencia al apartado IV. Cuota Tributaria, Art. 5,2 y piden que se cambien las tarifas incluidas en el mismo.
Tomando como referencia el valor más bajo de los propuestos, (0,08€, metro cuadrado por día, Epígrafe 1.1 ventorrillo sin ánimo de lucro) y las tarifas de cuota única fijadas en otros municipios de Canarias, Alternativa cree que la ocupación de la vía pública con carácter general para cualquier actividad y época del año, debería estar fijado en 0,10 céntimos de euro por metro cuadrado y día, mientras que para los colectivos sin ánimo de lucro (organizaciones sociales, culturales, benéficas, deportivas, políticas y sindicales), la cuota tendría que bajar a 0,05 céntimos de euro por metro cuadrado y día”.
Además, los concejales arrecifeños piden que se sustituya, en el enunciado de la Ordenanza la palabra “barraca” por la de “ventorrillo” por ser esta la forma tradicional de nombrar este tipo de actividad.
Alternativa Ciudadana comparte la necesidad que hay que regular todo lo concerniente a la ocupación de la vía pública para terminar con la arbitrariedad de cobrar lo que le parece al responsable de turno y para evitar que particulares subroguen esta capacidad. Para ello considera que se deben tomar criterios ecuánimes y, sobre todo, debe prevalecer el afán regulador, propulsor de actividades tradicionales, de ocio y culturales. Nunca el ánimo recaudatorio.
Tal como señala el Art.2 de esta Ordenanza el hecho imponible es “la utilización privativa o el aprovechamiento especial que se deriva de la ocupación de la vía pública”. Por tanto, manifiestas que “solo y exclusivamente se deberá cobrar por estar en la calle y no por las actividades que se desarrollen”.
Asimismo, y considerando que el suelo susceptible de ocupar para desarrollar este tipo de actividades es siempre el mismo, Alternativa no comparte tampoco que “en unas épocas del año se cobre más y en otras menos. ¿Por qué el mercadillo semanal que se realiza en el parque Ramírez Cerdá costará una media de 6 € día y, en el mismo sitio, con el mismo tamaño, en Navidades, supone 15€?, ¿por qué, en Carnavales se cobrará la mitad?”, se pregunten.
A juicio de los ediles, las fiestas locales hay que potenciarlas tanto con contenidos culturales y deportivos como también con ocio y entretenimiento. En este apartado señalamos que todo lo que respecta a las atracciones, venta de productos alimenticios etc. son muy importantes. “Los ciudadanos disfrutamos más de las fiestas cuando se cuenta con estas atracciones”, añaden.
Mención aparte quieren hacer en sus alegaciones de los ventorrillos típicos de esta tierra. Se han caracterizado por ser lugares de encuentros y de descanso de los padres después de pasear a sus hijos por la feria. Son el final de la jornada. Este municipio, en tiempos pretéritos, se destacó por la gran cantidad de este tipo de actividad y hasta el Ayuntamiento hacía concurso entre ellos premiando al más animado, mejor comida etc.
También se han caracterizado por ser una actividad que los colectivos sin ánimo de lucro han utilizado para la recaudación de fondos para financiarse y lograr sus objetivos sociales. Entre ellos destacaban sindicatos, partidos políticos, murgas, comparsas, corales, rondallas, asociaciones vecinales, deportivas y culturales, asociaciones juveniles, alumnos de centros educativos, etc.. Por ello, explican que “gravar esta tradicional actividad será la decadencia total de la misma como ya sucedió en el 2002 que no hubo ninguna”.
Para Alternativa es importante también valorar el esfuerzo que supone instalar, mantener en condiciones, custodiar estas instalaciones durante el tiempo autorizado. “Es muy grande” -dicen- “y por eso, aunque sea voluntario, se tiene que tener e cuenta a la hora de establecer tarifas que incentiven a seguir adelante tanto a los colectivos como particulares que tienen en estas actividades su forma de vida”.
Con estas alegaciones Alternativa trata sencillamente de fijar un valor ecuánime, que incentive las actividades tradicionales, las atracciones de ferias, los circos, etc... Al contrario de otras actividades molestas como la construcción, “éstas relajan, culturizan y divierten a los ciudadanos y no supone al Ayuntamiento gasto alguno”.