El Consistorio sureño se comprometió a aportar la mitad del dinero en la última visita de Julio de la Rosa

La habilitación de la estación de guaguas de Yaiza como centro de salud será financiada por Ayuntamiento y Consejería

Juan Manuel Sosa se lo comunicaba a los vecinos de la localidad en una reunión en la que les aseguró que el comienzo de la obra sólo está a la espera de la confirmación de la cuantía exacta del presupuesto, entre 48.000 y 60.000 euros

Los vecinos de Playa Blanca salieron conformes de la reunión mantenida este jueves con el director insular de Sanidad, Juan Manuel Sosa. El responsable del área de Salud en Lanzarote les aseguró que el comienzo de la habilitación de la estación de guaguas de la localidad como centro de salud sólo está a la espera de la próxima confirmación de la cantidad exacta que costará la obra.

Por ahora, ya les ha confirmado que el problema de la financiación está resuelto porque se compartirá al cincuenta por ciento entre el Servicio de Salud del Gobierno de Canarias y el Ayuntamiento de Yaiza, que se comprometió a hacerse cargo de la mitad de la cuantía en la última visita del director de Infraestructuras Sanitarias de Canarias, Julio de la Rosa.

Entre 48.000 y 60.000 euros se estima que sume el montante de esta obra de habilitación, que no debería llevar más de dos semanas, “ya que el local ya tiene el visto bueno de la Consejería de Sanidad”, como explicó a Crónicas el propio Sosa.

Según el director insular, será entre este viernes y el próximo lunes cuando se le comunique cuál es la cantidad exacta de la obra, momento a partir del cual sólo habría que ponerse en contacto con la empresa constructora y con el Consistorio sureño para determinar cuál será la forma de financiación.

En principio en este punto no habrá ningún problema atendiendo a la buena disposición de todas las partes, que como asegura Sosa son “los primeros interesados”, por lo que a partir del comienzo de los trabajos de reforma sólo habrá que contar dos semanas aproximadamente.

En total, todo este proceso, entre trámites y obras, podría prolongarse un mes más.

Por su parte los vecinos se mostraron conformes con esta resolución de un conflicto que les trae de cabeza desde que se anunciase el traslado de las dependencias sanitarias como requisito para comenzar las obras de ampliación de su actual centro de salud, un traslado que se encontró con multitud de impedimentos.

Consenso en la ubicación

El nuevo enclave en el que se situará provisionalmente esta infraestructura sanitaria les parece tanto a los vecinos como al director insular el más adecuado no sólo por la cercanía al núcleo de población, sino porque esta reforma dotará en un futuro al municipio de un recinto habilitado para otros servicios consistoriales.

Por todo esto, Sosa entiende que no se pondrá ninguna pega por parte del Ayuntamiento para hacerse cargo del compromiso adquirido por su alcalde, José Francisco Reyes, ya que es una medida que “beneficiará al municipio”.

La reunión con los vecinos responde a la voluntad de Sosa de mantener informados a los afectados, que llevan meses reclamando una respuesta a este conflicto, y se ha comprometido a informarles inmediatamente en cuanto conozca cuál es el importe de la obra.

Un camino difícil

Esta no es la primera vez que se lo pone fecha a la resolución del conflicto de los vecinos de Playa Blanca, que llevan meses solicitando un servicio de urgencias 24 horas para la localidad costera.

Después de que les asegurasen que este servicio comenzaría a funcionar en el centro de salud provisional en el que trabajaría el personal sanitario, mientras se ampliaba la infraestructura actual, vieron como pasaba el tiempo sin ningún movimiento en este sentido.

Finalmente, un grupo de vecinos de Playa Blanca decidía manifestarse el pasado 14 de junio frente al centro de salud, para denunciar el retraso en el comienzo de la obra y en el consecuente traspaso.

En ninguna de las conversaciones mantenidas entre el director insular y los vecinos ni en los contactos con el Ayuntamiento se había apuntado a la posibilidad de ubicar el servicio en la estación de guaguas. Muy al contrario, se había estimado la propuesta de alquilar unos bungaloes ubicados en una zona más alejada, en Costa Papagayo, e incluso en un inmueble más grande cercano a la localidad.

Sin embargo, para Sosa este cambio es de lo más satisfactorio y lo ve con muy buenos ojos porque soluciona el conflicto del alquiler y "desbloquea" el comienzo de la obra. La mayoría de los vecinos coinciden en esta valoración.

Ahora sólo esperan que las promesas de Sosa, que asegura que si todo se cumple según lo previsto no tardarían más de un mes en abrir las puertas del centro provisional, se cumplan y no se largue más su espera.

Para ello, tienen que confluir sobre todo las opiniones de Ayuntamiento y Ejecutivo regional en cuanto a la financiación. El director insular cuenta con la buena disposición del Consistorio sureño para poner la mitad de este dinero, mientras que el resto sería aportado con alguna fórmula en la que podrían participar la empresa constructora y el propio Servicio Canario de Salud.