Los especialistas recomiendan el uso de genéricos en el caso de que no se encuentre el producto recetado por el médico

Lanzarote también sufre la doble insularidad en la llegada de medicamentos básicos

Muchas farmacias tienen problemas para abastecerse de fármacos de uso diario

Por Laura San José

La patronal de los laboratorios farmacéuticos, Farmaindustria, asegura que el 68% de las farmacias sufre retrasos o desabastecimientos de medicamentos, que en un 88% de los casos se prolonga durante tres días o más. Esto supone que en muchas ocasiones, los pacientes que acuden a uno de estos establecimientos no encuentran los productos recetados por sus facultativos. Si en algunos casos esto no supone más problema que la molestia de tener que buscar otra farmacia o acudir otro día, en otros, como en los casos agudos, puede generar un auténtico sufrimiento. Sólo hace falta pensar en el caso de un asmático con una crisis que acude a una farmacia y no encuentra un inhalador que le permita respirar.

Para colmo de males, las farmacias de Canarias todavía tienen más problemas que las de la península para hacerse con estos productos, y no digamos nada Lanzarote, Fuerteventura o La Graciosa, donde la situación puede llegar a ser caótica.

El presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de las Palmas, Jose Luis Mola Doreste, quiere quitar dramatismo a este asunto, que asegura, poco a poco se va solucionando, pero no deja de entender la importancia de una pronta resolución. Asegura que “esto nos preocupa bastante y somos conscientes de que tenemos que solucionarlo cuanto antes porque ha habido retrasos en algunos medicamentos esenciales y no lo podemos permitir”. Asevera que “esto es una lucha que tiene Industria con la distribución y los farmacéuticos de a pié nos estamos viendo cogidos en medio”. Aún así, explica que se ha puesto en marcha una plataforma de información para recoger los datos necesarios para arreglar el conflicto.

Tardanza en Canarias

Mola Doreste explica que si esta situación es grave en la península, el problema se complica todavía más en Canarias y no digamos nada en las islas no capitalinas. Comenta que “a 2.000 kilómetros de los laboratorios, lo único que podemos hacer es confiar en el buen hacer de los profesionales de la farmacia, que se están preocupando por tener los genéricos con los que suplir la carencia de determinados fármacos”. En cuanto a los retrasos que se dan en Lanzarote o Fuerteventura y en general, en cualquier isla que no sea Tenerife o Gran Canaria, Mola Doreste asevera que “estamos poniendo todos los medios que están a nuestro alcance para que haya un servicio diario pero es evidente que tenemos que estar muy encima del tema”.

14 días de diferencia

En el Archipiélago se da una diferencia de 14 días en cuanto a la entrada de medicamentos con respecto a la península, una situación que los profesionales ya tienen prevista y que les ha obligado a disponer de mayores cantidades de fármacos almacenados.

Hay que tener en cuenta que muchos ciudadanos no son lo suficientemente prudentes como para hacerse con los medicamentos que necesitan antes de que se les acaben los que tienen en casa. En su caso tendrían la posibilidad de acudir a la farmacia con tiempo suficiente; no como aquellos a los que se les receta un producto en el momento. Para ellos, la recomendación general es que se hagan con los genéricos, que a fin de cuentas, tienen los mismos componentes que los recetados. Aquellos que son más maniáticos y sólo quieren el que les ha recomendado el médico, tendrán que buscar el establecimiento en el que lo tengan o volver al cabo de unos días.

Una de las causas que los laboratorios exponen para explicar este desabastecimiento de medicamentos es que estos se desvían a otros países europeos en los que la diferencia de precios provoca mayores beneficios económicos. En opinión del presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Las Palmas “se ha creado esa plataforma para saber lo que está pasando realmente y si eso es así, cortarlo de raíz”. También comentan desde los laboratorios que esta situación se solventaría si el precio de los fármacos fuera libre en nuestro país, a lo que Mola Doreste responde que “aquí los precios vienen marcados por el ministerio de Sanidad y es mucho más bajo de lo que realmente cuestan los medicamentos y creo que debe seguir así”. Por eso cree que la solución está en aclarar dónde se quedan estos artículos una vez que han salido de los laboratorios.

Venta en supermercados

Mola Doreste tampoco cree que la solución estaría en la venta de fármacos en los supermercados ya que indica que es un producto sanitario que requiere de un control y si se vendiera en las grandes superficies, todavía podría complicar más las cosas porque intervendrían factores económicos que no son los adecuados en un producto como el farmacéutico.

En cuanto a la venta por Internet, asegura que ya se están llevando a cabo los trámites para que esto pueda darse, eso sí, siempre y cuando se disponga de la intervención de un facultativo que controle a dónde van a acabar esos fármacos.

Por último y en cuanto a la conciencia del uso de medicamentos genéricos, Mola Doreste afirma que es grande en la provincia de Las Palmas aunque todavía quedan sectores como la gente mayor que quiere una pastilla en concreto porque necesita guiarse por los colores de los medicamentos que ingiere o el grupo de personas que por el puro efecto placebo, piensa que si no se toma un producto en concreto, no le va a servir de nada.