La oficina de la Bolsa de Vivienda Joven espera dar salida a los inmuebles vacíos con precios de alquiler y compra asequibles
La Oficina de la Bolsa de Vivienda Joven y Vacía de Lanzarote abrió este martes sus puertas en la Vía Medular con la presencia de la presidenta del Cabildo, Inés Rojas, el director del Instituto Canario de Vivienda, Jerónimo Fregel, y la alcaldesa de Arrecife, María Isabel Déniz. Este esperado servicio de asesoramiento se pone en marcha en la Isla con la intención de facilitar el acceso a la vivienda a los más jóvenes poniéndolos en contacto con los inmuebles que se ajusten a sus necesidades y posibilidades económicas.
En este sentido, el servicio ofrece de forma gratuita el asesoramiento sobre los trámites necesarios para comprar y alquilar una casa y sobre las ayudas y subvenciones a las que pueden acogerse. Además, ofrecen a los interesados un listado de las viviendas incluidas en los programas de acceso a la vivienda que aseguran al propietario ventajosas condiciones de arrendamiento o venta y al interesado un precio asequible y ayudas en los pagos.
Para conseguir estas ventajas para ambas partes, el servicio de vivienda joven espera integrar en el mercado inmobiliario todas las viviendas útiles de las 8.000 que se encuentran vacías en la actualidad en Lanzarote.
Para la compra de las estos inmuebles o de los que elija el consumidor se puede también optar a la Hipoteca Joven Canaria, que también pude ser solicitada y tramitada gratuitamente a través de este servicio.
Además, en la oficina en la que se ubica este servicio se encuentra también un servicio de información sexual en donde los jóvenes podrán resolver todas sus dudas sobre este tema.
Grandes previsiones
La apertura de esta oficina en la Isla es una demanda que los jóvenes llevan tiempo reclamando. Hasta ahora la única información sobre ayudas a la vivienda que se podía obtener en Lanzarote se gestionaba a través de la Consejería de Vivienda, que no aportaba más que la información sobre la Hipoteca Joven y analizaba cada caso para calcular el importe al que podía acceder.
Ahora, con la Bolsa de Vivienda Joven este servicio se ampliará, o al menos así lo esperan los responsables de su ejecución, ya que teniendo en cuenta los resultados obtenidos en el resto de oficinas abiertas en el resto del Archipiélago la experiencia triunfa.
Sólo en 2006 calculan que 8.000 jóvenes accedieron a una vivienda a través de la Bolsa y desde que se abriera la primera oficina en Canarias en el año 1998 son 22.000 los usuarios que se han beneficiado de este servicio para comprar o arrendar un inmueble.
Además espera atraer a los propietarios de viviendas en la Isla que tienen cerradas sus casas para que las incluyan en mercado inmobiliario con las garantías que les ofrece este servicio.