Políticos, sindicatos e incluso asociaciones de consumidores creen poco ético ofrecer dinero o subidas de pensiones a pocas semanas de las elecciones

¡Se compran votos!

Según la secretaria general de CCOO en Lanzarote, parece que con la nueva propuesta del PSOE “te van a dar 400 euros en cuanto introduzcas el voto”

“Aunque la compra de votos está castigada por la Ley, parece que con lo de los 400 euros nos están sobornando”

“Yo entiendo que el Gobierno no está como para andar regalando el dinero a los ciudadanos o como para prometer que se van a crear 2 millones de puestos de trabajo y que está pasando como con los 800.000 empleos que prometió Felipe González, que hay mucha gente que todavía está esperando verlos”

"A los mileuristas o a los que ganan menos de ese dinero y no llegan a fin de mes es a quienes tienen que quitar el IRPF porque lo de los 400 euros, como vienen se van”

José Luís Rodríguez Zapatero promete devolver 400 euros del IRPF si gana las elecciones, pero asegura que antes no puede hacerlo porque existen ciertas dificultades técnicas. Si con los 1.200 euros por niño, el actual presidente del Gobierno ya fue tildado de populista, con esta nueva medida se ha ganado la crítica de prácticamente todos los sectores de la sociedad. Y es que esta iniciativa suena a “vótame y te doy 400 euros”; es decir, es lo más parecido a una compra de votos que se ha hecho en una campaña preelectoral.

Obviamente no sólo el PSOE está intentando conseguir ganar las elecciones. Por su parte el PP ha tocado la tecla mágica para una buena parte de una sociedad española, cada vez más envejecida, “la subida de pensiones”.

Pero, ¿son factibles todas esas promesas que se lanzan al vuelo o son simples reclamos que se realizan para que se queden grabados en el subconsciente de los votantes?

En opinión de Victoria Sande, la secretaria general del sindicato CCOO en Lanzarote, “lo que los ciudadanos queremos escuchar es que nos van a solucionar los problemas con los que vivimos día a día pero tenemos que ser muy realistas con las promesas que nos hacen y escucharlas bien porque aunque no entendamos mucho de gran economía, debemos ser conscientes de que muchas promesas son difíciles de cumplir y que nadie da cosas por nada”.

Una de las cuestiones en que han coincidido PP y PSOE es en la creación de más de 2 millones de puestos de trabajo. Muchos se preguntarán que si ambos partidos saben la fórmula para conseguir que tanta gente abandone las filas del INEM, ¿por qué no se ha hecho ya? En opinión de Sande, “las promesas suelen quedar en un saco roto y lo que los políticos deberían hacer es ir demostrando que van haciendo cosas, aunque luego los frutos tarden en verse”. Explica que “con lo de los 400 euros, parece que aunque la compra de votos está legalmente castigada, con esta propuesta da la impresión de que los están comprando”. Asevera que “no nos van a dar 400 euros cuando salgamos de votar y hay que tener en cuenta que si nos lo dan por un lado, por otro tendremos que pagarlo y es importante que no nos dejemos engañar por ningún partido político”.

¿Está la cosa para dar dinero a los ciudadanos?

“Yo entiendo que el Gobierno no está como para andar regalando el dinero a los ciudadanos o como para prometer que se van a crear 2 millones de puestos de empleo y que está pasando como con los 800.000 puestos de trabajo que prometió Felipe González, que hay mucha gente que todavía está esperando verlos” asevera la sindicalista. Piensa que “estamos en un momento de crisis y no sólo en el ámbito insular sino en el europeo”.

Desde la asociación de consumidores Facua se ha criticado que esta medida de los 400 euros sería injusta en tanto en cuanto supondría el mismo reembolso de dinero para trabajadores con un altísimo poder adquisitivo como para empleados que ganan muy poco dinero al mes. En este sentido, asegura la secretaria general de CCOO en Lanzarote que “se supone que todos somos trabajadores que estamos dados de alta y que todos merecemos que nos traten por igual aunque creo que lo que habría que hacer sería establecer un baremo y que se estudiaran cuestiones como la renta, los hijos o si se está pagando una hipoteca porque en muchas ocasiones trabajadores que están ganando 18.000 euros pagan incluso más en proporción que los que han ganado 50.000 euros”. Afirma que “lo que a mí me gustaría es que se acabara ya con la situación que están viviendo los mileuristas y muchísima gente que ni siquiera llega a cobrar este dinero y que no llega a final de mes”. Comenta que “a esa gente es a la que tienen que quitar el IRPF porque lo de los 400 euros, como vienen, se van”. Aún así, reconoce que “lo de los 400 euros me sigue sonando a soborno y no me ha gustado nada el planteamiento que se ha hecho”.

Los trabajadores autónomos también se han opuesto a esta idea que les discriminaría en comparación con los asalariados. Como asevera Sande, “ni siquiera habría que mirar si hay un agravio comparativo; lo que hay que ver es que nos están comprando el voto”.

Sin nos dan de un lado, nos lo quitarán de otro

Argumenta Sande que “lo que nos tienen que ofrecer son más beneficios sociales y si nos quieren bajar los impuestos está muy bien, pero que no lo hagan sólo con los del IRPF porque también pagamos un montón de dinero en los Ayuntamientos”. Sin embargo, asevera que “lo que no podemos obviar es que las arcas del Estado se nutren de nuestro dinero y de alguna otra parte nos lo iban a sacar”.

Pero no sólo el PSOE ha lanzado una propuesta populista. Entre otras cuestiones, el PP ha prometido subir las pensiones si gana las elecciones, una medida que puede llegar al corazón de muchas personas mayores que lo tienen realmente complicado para llegar a fin de mes. Y teniendo en cuenta que la sociedad española cada vez está más envejecida, esto podría suponer muchos votos. Además, Rajoy también ha prometido reducir el IRPF a las mujeres trabajadoras, lo que podría arrancar unos cuantos votos entre el electorado femenino. Dice Sande que “todos los partidos siempre van a tender a hacernos pensar que con ellos vamos a estar mejor, pero en el caso del PP, hay que recordar que la derecha se ha extremado muchísimo y la trayectoria que ha llevado votando en contra de la Ley de Igualdad demuestra una cierta contradicción”.

En cuanto a lo de las pensiones, dice que “la subida de las pensiones no tendría que ser una promesa sino un hecho porque la gente no puede vivir con 400 euros”.

Piensa la sindicalista que “en algunas ocasiones todos juegan un poco con términos muy técnicos y nos abruman con cosas que no entendemos pero que pensamos que ellos sí dominan”.