La policía está investigando si el responsable tiene algún tipo de animadversión contra el Premio Nobel o su viuda, Pilar del Río

El director de la Casa Museo Saramago admite haber recibido llamadas amenazantes

Pérez también ha destacado las dificultades económicas que está atravesando la Casa Museo

La Policía Local ha abierto una investigación sobre este acto vandálico al entender que el suceso va más allá del simple vandalismo y que no tiene nada que ver con la celebración de la noche de Halloween. El propio director del Museo reconoce que recibió llamadas amenazantes y no descarta que el acto vandálico tenga posibles tintes de venganza.

Javier Pérez, director de la Casa Museo, aseguró en el programa “La Mañana de Lanzarote” de Crónicas Radio – Cadena Cope de este lunes que están ciertamente sorprendidos y preocupados por el acto que se produjo entre las 23.00 y las 00.00 horas del jueves. Sin embargo, reconoce que ya días antes había recibido mensajes amenazantes en su número de teléfono desde un número oculto, pista que está investigando la policía, y que parece descarta que el hecho tenga algo que ver con una gamberrada propia de niños el día de Halloween.

Pérez destaca que nunca hasta el momento habían tenido incidentes semejantes y por eso, no saben si se trata de algún detractor de la figura de José Saramago o de su viuda, Pilar del Río.

Según el director de la Casa Museo, a la policía le ha sorprendido que el responsable o responsables llevasen un bote de pintura, lo tirasen en la cancela, saltasen la valla y llegaran hasta el portón principal.

Los daños, que calculan en unos 250 euros, se ocasionaron por el lanzamiento de un producto mezclado con pintura que ha dejado manchas en las puertas, el pasillo, la cancela y el portero automático.

Más que el daño económico, lo que sienten es el daño moral que produce un ataque que para ellos no tiene fácil explicación.

Pérez ha destacado las dificultades económicas que está atravesando la Casa Museo, que está abierta prácticamente por una cuestión sentimental de la viuda del Premio Nobel. Asevera que el lugar no está bien señalizado, y culpa en este sentido al Cabildo de Lanzarote, y reconoce que aunque han llegado a acuerdos con touroperadores y están haciendo publicidad del Museo, no han conseguido las visitas que tenían previstas.