martes. 29.04.2025

Una isla cuya adormilada sociedad se moviliza antes por el carnaval que por carencias mil u otras obscenas carestías en la cesta de la compra -un suponer-, se merece padecer a los peores políticos del mundo y parte del extranjero... incluso quienes no los votamos ni locos, ni en broma, ni borrachos ni por una apuesta.

Precisamente en martes de carnaval vino a caer la fecha de la efeméride que recordará el día que José Francisco Reyes fue descabalgado de la mullida Alcaldía del sureño y megaturístico Ayuntamiento de Yaiza. Debatióse la moción de censura y no hubo nada, por remedar al poeta. Bueno, sí que salió una nueva mayoría gobernante, conformada y confirmada por el PIL, que pone a la alcaldesa, y Coalición Canaria. ¿Significa este segundo ayuntamiento entre el PIL y CC (el primero fue el acuerdo de acudir juntos a las elecciones generales del 9 de marzo) que se van a prolongar los arrumacos y los encames en otras instituciones? El PSOE dice que no. Y el PIL dice lo que quiere oír el PSOE. Y usted y yo nos creemos de la misa ni la mitad...

Después de casi quince años (tres lustros, se escribe pronto y fácil) en la primera poltrona municipal, José Francisco Reyes deja el reinado, tal y como es veía venir no más perdió la mayoría absoluta en las pasadas y pesadas elecciones locales. No ha nacido alcalde en esta pobre islita rica que pierda una mayoría absoluta y se mantenga en el cargo algo más de lo que dura un chupachú en la puerta de un colegio. Como vecino del céntrico y centradísimo Ayuntamiento de San Bartolomé, doy fe. De momento, y con perdón por el elemental juego de palabras, “Yaiza...cabó lo que se daba”.

Creo en el nuevo grupo de gobierno municipal resultante de esta moción de censura carnavalera (lo digo por la fecha en la que tocó debatirse la misma) lo mismo que en el anterior: nada. Pero en principio parece hasta higiénico y tengo para mí que debería ser obligado y estar recogido y prohibido por ley no pasar más de dos mandatos, 8 años -y ya me va pareciendo mucho tiempo, que aquí la gente se relaja y se enrala muy pronto-, al frente de una Alcaldía o de una Presidencia cabildicia. Todos los que han permanecido ese tiempo o más en el cargo han terminado confundiendo a la institución como su casa, con su propiedad. ¿Hay necesidad de poner ejemplos con nombres y apellidos? El lector los tiene en su mente.

Caído José Francisco Reyes (Paco Pepe para los amigos y demás personas piadosas), el otro alcalde que más tiempo lleva alcaldeando en Lanzarote es el de Tías, que además tomó el relevo correligionario a Florencio Suárez cuando vio que su taxi iba libre. Total, que el PSOE lleva haciendo y deshaciendo en el municipio turístico conejero por excelencia -que se dice- desde cuando uno era chinijo, feliz e indocumentado (esto último lo sigo siendo, valgan verdades). La heterogénea población de Tías no ha terminado aún de echar a José Juan Cruz Saavedra del machito, pero ya le viene dando serios avisos desde hace unos dos mandatos, hasta el punto que en la última cita electoral lo dejó huérfano de la siempre golosa mayoría absoluta. El suyo también es un sillón caliente... o una silla que, a poco que se descuide o se vaya a Sevilla (o a Fitur o por ahí), la pierde.

Frases hechas: El poder corrompe; y el poder absoluto corrompe absolutamente. Pues si además de poder absoluto es cuasi infinito o vitalicio, ya ni les cuento. Por eso creo que si en los partidos políticos se impusiera alguna vez la mínima seriedad, que nunca ha sido el caso en Lanzarote, evitarían presentar como candidatos a los que les ha crecido la barba y la cuenta corriente más de lo corriente en los cargos, en las primeras poltronas, en las concejalías o consejerías. Y si fueran o fuesen serios los propios candidatos en cuestión -que tampoco se ha visto el caso-, no se presentarían ni se prestarían a seguir engordando el nepotismo institucional. Pero hablar de seriedad y político conejera es tratar de asuntos claramente antagónicos, como es triste fama.

Los censurantes y los dirigentes de los partidos a los que pertenecen los mismos siguen jurando a los cuatro vientos que la “puntual” moción de censura en Yaiza no significa, necesariamente, que se vaya a producir un efecto cascada o dominó en otras instituciones susceptibles de ser censuradas por los mismos censuradores (más otros añadidos). Qué va. ¿Alguien se lo cree? Yo tampoco. Pero la pregunta principal no es qué va a suceder entonces sino cuándo va a suceder. En cualquier caso, muy pronto. Para el PSOE, demasiado pronto. (de-leon@ya.com).

El “supermartes” de Gladis
Comentarios