Queridos lanzaroteños y lanzaroteñas:
Este 24 de abril no ha sido un día cualquiera. Es una fecha que debería estar marcada con orgullo en nuestro calendario colectivo, porque tal día como hoy, en 1919, nació uno de los hijos más ilustres de nuestra tierra: don César Manrique Cabrera.
Desde el FSOC, y en especial desde el Comité de Empresa de los miembros de los CACT, queremos alzar la voz para recordar, homenajear y celebrar la vida de quien no solo fue un artista excepcional, sino también el alma visionaria que ayudó a moldear la identidad de esta isla. Porque gracias a él, Lanzarote no solo es reconocida por su belleza natural, sino también por el profundo respeto con el que se ha integrado el arte, la arquitectura y el paisaje.
César no fue solo un creador de obras, sino un defensor incansable de nuestra esencia. Su legado nos enseñó que se puede avanzar sin destruir, que la modernidad no está reñida con nuestras raíces, y que la naturaleza no es algo que se explota, sino algo que se ama, se protege y se honra.
Él mismo nos pidió que recordáramos el día de su nacimiento más que el de su partida. Hoy cumplimos ese deseo. Hoy celebramos que, gracias a su sensibilidad y compromiso, Lanzarote es uno de los lugares más bellos del planeta. Hoy recordamos que, sin su voz, sin su lucha, sin su arte, esta isla no sería la que es.
Por eso, invitamos a cada vecino, a cada familia, a cada rincón de esta tierra a recordar a César Manrique como lo que fue: un faro que nos sigue guiando. Que este día se convierta, año tras año, en una oportunidad para mirar a nuestro alrededor y agradecer.
Feliz cumpleaños, don César. Su luz no se ha apagado. Su obra vive en cada volcán, en cada mirador, en cada rincón de nuestra alma.
Con respeto y profunda admiración,
Los miembros del comité de empresa del Frente Sindical Obrero de Canarias (FSOC)