La guerra contra el petróleo se perdió en Canarias desde el momento y hora que, para cometer un asesinato de imagen contra el PP que les había ganado las últimas elecciones locales, el PSOE y CC, tanto en el (des)Gobierno regional como en el cabildicio conejero, la intentaron manipular (con todo el aparato mediático que controlan, convirtiendo a periodistas en simples o simplones publicistas, meros hombres-anuncio por un puñado de euros) en su descarado beneficio electoral. Fue y sigue siendo tan descarada la utilización de las instituciones en beneficio exclusivamente partidista que causa vergüenza ajena el simple hecho de recordar esa evidencia
Que la gente empieza a verle las orejas a ese lobo artero y manipulador quedó más que claro en el otro intento de manipular el concierto de Rosana en Tías (municipio gobernado por el PP), para trocarlo en un manifestación anti-PP, más que antipetrolera. Se trataba de colarles a los despistadísimos “pepones” lanzaroteños otro gol en propia meta. Pero como esta vez las aviesas intenciones de CC-PSOE las veía hasta un ciego, fue absoluto el fracaso de esa manifestación a la que sólo acudieron cuatro gatos vestidos de blanco, todos ellos –por lo que se pudo ver en las fotos- viviendo casualmente del gobierno CC-PSOE, o de sus proximidades, tanto monta, monta tanto el montaje. Todos ellos con trabajo más que bien remunerado. Todos ellos echándole al asunto más cara que espalda, convencidos de que todo el pueblo es idiota y no ve el farol político.
Ya habrás leído durante el pasado verano que el Tribunal Supremo, una vez más, desestimaba el recurso de reposición que había interpuesto el gobierno (es un decir) de Canarias contra el auto del 4 de junio. Por supuesto y por descontado, tanto el Ejecutivo regional como el Cabildo conejero se lanzaron en plancha a decir que eso ni es nada nuevo ni supone que se les quite definitivamente la razón. Hasta la duda ofende, caballero. En realidad, lo que no es nada nuevo es que el Supremo venga otra vez anunciando rebajas a los que venden humo, y que encima tendremos que pagar todos las costas (costas, ¿lo coges?) por la impostura del desgobierno regional y del Cabildo conejero. Tiempo al tiempo, que habrá que esperar muy poco ya para verlo.
Te he contado aquí mismo, desde el inicio de esta mala película con más trucos que una de artes marcianas (marciales, quise decir), que todos van de farol todo el rato. Todos mienten, aunque unos más que otros, valgan verdades. “Pe-troleros” los llamamos ya en esta misma tribuna. Pero el que ha contado las mentiras más gordas, y en ello sigue, es el PSOE, con mucha diferencia sobre cualquier otro de los actores de este esperpento. La hemeroteca, esa gran enemiga del político impostor y embustero, no me dejará por mentiroso. En caso de duda, recordemos la recurrente serpiente de verano de 2010, hace ahora justos dos años. Titular recogido en varios medios: “El Gobierno de Canarias no cierra totalmente las puertas a la realización de prospecciones petrolíferas en las costas canarias”.
¿Recuerdas las palabras del propio Paulino Rivero por aquellas mismas fechas? Decía el presidente que lleva dos elecciones perdidas pero sigue en la más alta poltrona que “si entregamos un cheque en blanco para que Repsol se lucre en aguas canarias y que eso sea sólo para negocio de los privados o para beneficios que no llegarán a los canarios, la respuesta es rotundamente no”. Tan rotunda es esa respuesta que, en realidad, es un no pero sí. No hay ni que leer entre líneas. Queda claro el oscuro mensaje, al menos para quien quiera ver la realidad y no opte por seguir poniéndose una venda en los ojos.
Más recientes en el tiempo son las palabras del todavía secretario general del PSOE canario, el mismito José Miguel Pérez que dijo en mitad de los carnavales de 2011 que por supuesto que su partido estaba a favor de explotar el petróleo, en caso de que lo hubiera o hubiese en las costas insulares, porque no era plan renunciar a ese potencial económico en tiempos de una crisis tan profunda que ya no recuerdan ni los más viejos del lugar. Ya por aquel entonces descubría el mandarín de un PSOE canario desnortado y proa al marisco la total engañifa psoecialista que muchos nos olíamos de antemano. Se desenmascaraba de aquella manera el discurso cínico de ese partido/rajado con respecto a las explotaciones petrolíferas en las costas conejeras y majoreras. Saltaba así por los aires, una vez más, el habitual doble lenguaje del PSOE, que ha vuelto de nuevo a cambiar de guión sólo por hacerle la guerra a su enemigo público número uno, un tal José Manuel Soria, líder del PP canario vencedor en las pasadas elecciones que llevaron al Gobierno a CC y al PSOE. Llámalo hipocresía, si te gusta hablar en cristiano, pero es lo cierto que ni nombre tiene ya tanta pose pretendidamente ecologista y tanto engaño a su propio electorado.
Te avisé aquí mismo, hace apenas unos meses, que hay mil y una mentiras más que están a punto de ser descubiertas. La supuesta apuesta (de boquilla) por las energías renovables es sólo uno de los embustes más gordos que nos han contado. Ahora, en otoño y con las lluvias, muchas de esas mentiras seguirán saliendo a flote. Al final, como decíamos allá cuando chinijos, la trampa siempre sale. (miguelangeldeleon.blogspot.com).
