Tras la última peripecia carcelaria de Instituciones Penitenciarias con el líder del PIL, una vez que sabemos todos cómo está el patio, queda preguntarse ya abiertamente cuánto tiempo le queda al pacto PIL-PSC. Nosotros creemos que no demasiado, sobre todo por lo que sucedió este miércoles. La situación es especialmente difícil en Arrecife, donde hay ya dos bandos absolutamente diferenciados, y lo que es peor, enfrentados. Esta situación no se puede sostener por mucho tiempo, sobre todo por el bien de Lanzarote y de los lanzaroteños, cansados como estamos de que las cosas no funcionen en política por culpa de los políticos. Es malo que se rompan pactos, pero mucho peor es que se mantengan de forma forzada, porque así tampoco funcionan. Si no hay sintonía, que rompan y que dejen de mentir a los ciudadanos. La última oficial, por cierto, tiene que ver con el lío de Trasmediterránea. El senador Marcos Hernández, al que agradecemos en este medio que dé la cara -y a veces se la parta- siempre que se lo solicitamos -otros miembros de su partido con menos trayectoria deberían aprender algo de nuestro senador-, dejó claro en los micrófonos del programa matutino “El Despertador” que no le había hecho demasiada gracia el comunicado del PIL criticando el Real Decreto de Fomento. La respuesta del consejero del Cabildo Ramón Bermúdez ha sido clara: dice que en lugar de dedicar tanto tiempo a “derribar hoteles” debería leer más los informes que emite “su Gobierno”. Si esto es tener buen rollo entre los socios de gobierno que venga Dios y lo vea.
¿CUÁNTO LE QUEDA AL PACTO?
6 de diciembre de 2007, 8:08