miércoles. 30.04.2025

La que está cayendo en Lanzarote a cuenta del último asesinato, el de la joven dominicana Yuliisa Antonia Pérez, no es ni normal. Somos una vez más el foco de atención informativa en todo el país por un tema más que escabroso que tiene además un sinfín de incógnitas por resolver. Vamos, una campaña de promoción única. La gente que no está en Lanzarote pregunta: ¿pero qué está pasando allí? Pues no sabemos qué responder. Se supone que para eso están aquí varios expertos de la Policía Nacional, para dar algo de luz a una investigación que se ha torcido de forma impresionante, y se ha torcido porque el círculo cerrado del primer momento se ha ido extendiendo, se ha ido abriendo, y ya no hay hipótesis que se descarte. Hay que esperar y confiar, confiar en que el trabajo de la Policía dé sus frutos, confiar en que no se cumpla con lo que mucha gente piensa, que este último asesinato puede estar relacionado con los anteriores, todavía sin resolver. Mientras, el comisario de la Policía Nacional en Arrecife, José Antonio Fernández Camacho, se ha cogido unas vacaciones. No es que queramos criticarle por eso, porque tiene el mismo derecho que todo el mundo a hacerlo, aunque tal vez no sea el momento más oportuno. Fíjense cómo será la que está cayendo, que han llegado doce nuevos policías nacionales con plaza fija en Lanzarote y el director insular de la Administración General del Estado, el bueno de Carmelo García Déniz, ni siquiera ha querido presentarlos en sociedad. Y es que no está el horno para bollos.

MÁS POLICÍAS
Comentarios