martes. 22.04.2025
Ahora mismo cuatro construcciones de la zona costera están abandonadas tras prohibirles continuar los trabajos hace ya unos 7 años. Desde Teguise se habla de “maldad” o “vagancia” desde que se aprobó la moratoria

Alfredo Cabrera confía en “la buena voluntad” del Cabildo para subsanar el “error” cometido con las obras paralizadas en Costa Teguise

El concejal de Turismo de La Villa está convencido de que la Primera Corporación insular ha “sacado la calculadora” y ya ha verificado que “no se supera el techo de 2000 camas”, por lo que tendrán que retirar las órdenes de paralización impuestas. En el caso de parcelas como la del Club del Rey se intentó cambiar el uso turístico a residencial

La aptitud beligerante mantenida hasta ahora por el grupo de gobierno del Ayuntamiento de Teguise con respecto a la reactivación de las obras paralizadas en Costa Teguise parece haber amainado. Así al menos lo expresó este martes el concejal de Turismo del Consistorio, Alfredo Cabrera, en sus declaraciones a esta redacción, de las que se desprende una cierta esperanza en cuanto a este conflicto que trae de cabeza a la Corporación desde hace ya casi siete años.

Ahora, y sin determinar muy bien por qué, el concejal se muestra mucho más optimista y afirma que “el Cabildo ya ha sacado la calculadora y se enteró de que estamos casi en 2.000 camas por abajo”, por lo que está seguro de que a la vista de estos datos “de algún modo se rehabilitará el tema”.

Este ánimo en sus declaraciones tiene mucho que ver con el cambio que se ha producido a su parecer en el grupo de gobierno del Cabildo, en el que “existía una mala voluntad” que ahora parece que ya no encuentra en la presidenta, Inés Rojas, que “no tiene enemigos”. A nadie se le escapa el giro dado en la política territorial desde que los socialistas abandonaron el grupo de gobierno de la Primera Corporación insular, un cambio que podría provocar que asuntos que llevan estancados desde hace tiempo como el del Club del Rey finalmente se solucionen, terminando definitivamente con la mala imagen que tiene en la actualidad la urbanización.

Así, para el concejal, la razón por la que no se ha podido solucionar este conflicto “está claro” que tiene mucho que ver con que “ha habido una maldad impresionante”. “Y si no es maldad, es vagancia, porque se trata de coger una calculadora y punto, nada más”, subrayó.

Lo que ahora espera con confianza Cabrera es que “aquella mala voluntad que hubo” se convierta “en buena, de modo que no habrá ningún tipo de problema” para darle la razón a los demandados.

Un problema de años

La congelación de cuatro obras de esta zona turística la ordenó el Cabildo hace siete años al entender que con ellas se superaba el techo que establecía como máximo la moratoria de 2000. Desde que se conociese la noticia, el Ayuntamiento ha defendido el error de esta situación, que presupone que se ha superado el número de camas, que por su parte aseguran que está muy por debajo de las 2.000. El Consistorio que preside Juan Pedro Hernández ha defendido en todo momento la posibilidad de negociar a la baja esas camas turísticas, cambiando su uso a residencial, lo que hasta la fecha ha sido imposible.

Mientras tanto, los vecinos y turistas observan año tras año cómo se acrecienta la deprimente imagen de los esqueletos de las construcciones abandonadas. En concreto, ahora mismo son cuatro los casos que se mantienen parados a expensas de lo que determine el Cabildo. Se trata de la denominada Club del Rey, la estructura que se erige al lado del Hotel Playa Verde, la que se encuentra junto la casa del Rey y la ubicada frente al apartotel Teguisol.

Todas están en una fase muy pronta de construcción, por lo que se presentan al visitante como esqueletos de cemento alrededor de montañas de tierra y con una apariencia que evidencia su abandono.

“Yo creo que es de ley, el enorme daño que se le ha hecho no sólo a los propietarios de esas parcelas, sino a la urbanización Costa Teguise en su totalidad”, señaló Cabrera, que apuntó algunas de las consecuencias negativas derivadas de esta situación.

Entre otras, el concejal apuntó que “a Costa Teguise actualmente ya no está viniendo el turismo repetitivo, que era un porcentaje importantísimo del que acudía a esta zona”. La razón de esta respuesta de los turistas más fieles a este destino es que “a tenor de estas actuaciones tan faraónicas, los repetidores ya no van a Costa Teguise porque están viendo las ruinas de los esqueletos de los hoteles año tras año desde hace 6 o 7”.

El futuro de la zona

A pesar de las pérdidas que el auge de la zona turística pudiera haber aquejado, el concejal confía aún en su recuperación. “Yo no diría que es necesario un desarrollo total y absoluto de Costa Teguise, aunque es la única zona turística de Lanzarote que no se ha desarrollado”, pero sí que reclama que se le “dé carpetazo a esos cuatro problemas que están ahí en manos del Cabildo” y pueden a su parecer “solucionarse simplemente con solucionar la demanda habida cuenta de que ya está reconocido que no llegamos al techo que marca las normativas, y simplemente son parcelas que están ahí dormidas”.

Lo que espera el concejal es que el Cabildo termine aceptando “su error” y reconozca “la realidad, que no se superan las camas establecidas”, por eso declaró que no tiene “la menor duda de que si no se llega al techo de las camas turísticas la solución está en manos del demandante”.

Alfredo Cabrera confía en “la buena voluntad” del Cabildo para subsanar el “error”...
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