“Aquí no puede haber fallos porque no te los admiten”, de esta forma Tomás Fajardo, presidente de la Asociación de Consignatarios de Lanzarote, resume la enorme responsabilidad de las empresas que atienden a los cruceros que atracan en Los Mármoles. Según las previsiones de los consignatarios, la Isla recibirá 150 trasatlánticos entre octubre de 2006 y abril de 2007, considerada la temporada alta de este tipo de visitas turísticas. Aunque los consignatarios intentan al máximo no dejar cabo suelto, lamentan que la Autoridad Portuaria de Las Palmas, por más que lo reivindicaron una y otra vez, no haya aprovechado los meses de menor tráfico de cruceros para solventar la falta de abastecimiento suficiente de agua potable. La distribución mensual de llegada de cruceros es la siguiente: octubre (20), noviembre (40), diciembre (28), enero (16), febrero (15), marzo (19) y abril (12). De mayo a septiembre son pocos los cruceros los que atracan en la Isla de Los Volcanes.
Trabajo de los consignatarios
Las empresas consignatarias que tienen más barcos a su cargo son Lanzarote City, con unos 80, y Hamilton, que asiste alrededor de 60 cruceros. Lo primero que hace una empresa consignataria es reservar los atraques en el puerto, a partir de ahí se satisfacen las necesidades expresadas con tiempo e incluso las solicitadas con el crucero ya atracado, como lo relató a esta redacción Tomás Fajardo. “Cuando nos dan la lista de los cruceros que van a venir, con fecha exacta, reservamos los atraques”. Los consignatarios tienen la programación con la hora de llegada de cada barco y la información del puerto del cual proceden y del muelle a donde se marcharán. De acuerdo a esa programación y las previsiones de pasajeros, las empresas piden las guaguas necesarias para trasladar a los cruceristas hasta Arrecife. “Nosotros siempre estamos a disposición de los armadores y de los barcos”, anotó Fajardo, quien tiene un equipo humano de cinco personas preparadas para cumplir la misión. Si el barco viene de países que no hacen parte de la Unión Europea también interviene la Policía, que se encarga de hacer los respectivos controles de frontera.
Hasta 3.400 pasajeros por barco
Dependiendo del tonelaje, cada crucero deja unos ingresos económicos en el puerto. Hay barcos a los que se les factura 20.000 euros, incluyendo el atraque y demás servicios que se le prestan, y a otros más pequeños se les factura entre 12.000 y 10.000 euros. Normalmente los cruceros atracan a las 06:00 ó 07:00 horas y zarpan entre las 17:00 y las 20.00 horas. Los trasatlánticos que arriban a Lanzarote traen desde 1.700 hasta 3.400 turistas y, según Fajardo, “se baja un alto porcentaje de ellos”. El empresario calcula que un 90 por ciento de los pasajeros tocan suelo lanzaroteño. La dinámica de unas 8 guaguas que todo el día hacen el trayecto puerto - Arrecife - puerto y las excursiones que contratan los turistas en el barco, que demandan unas 20 guaguas más, son dos de los aspectos valorados por Fajardo para hacer sus cuentas. Cabe aclarar que las excursiones a los Centros Turísticos son organizadas por los touroperadores, de tal forma que ahí no intervienen los consignatarios.
Mayores pero también jóvenes
La gente de más edad con alto poder adquisitivo, por tener su situación económica definida, son los clientes habituales de los cruceros, pero Fajardo advierte de que ha detectado también visitas de jóvenes turistas, sobre todo parejas que acaban de casarse y que eligen el crucero para pasar su luna de miel. “Hay muchos jóvenes de nacionalidad italiana”.
En cuanto al último mes con cifras oficiales publicadas (junio), hay una diferencia significativa entre 2005 y 2006. En el ejercicio anterior arribaron durante ese mes 2.576 personas, pero este año en el registro aprecen 705 cruceristas. Los consignatarios miran con optimismo la nueva temporada, aunque prefieren no lanzar voladores y esperar el cumplimiento de las expectativas.