El Ayuntamiento de San Bartolomé ha aprobado inicialmente las bases para la concesión de subvenciones destinadas a la rehabilitación o adecuación de viviendas a las condiciones de habitabilidad, ahorro de consumo energético o accesibilidad. Según explica este viernes en nota de prensa, el Consistorio alcanzó el acuerdo durante el pleno que se celebró el día anterior. Entre las condiciones, destaca que las viviendas deben constituir el domicilio habitual de sus propietarios o arrendatarios en el momento de solicitar las ayudas.
El alcalde, Isidro Pérez, explica en su nota que se podrá ayudar gracias a esta subvención a un gran número de vecinos y vecinas de San Bartolomé a realizar adecuaciones en sus hogares acordes a las condiciones de accesibilidad y sostenibilidad medioambiental necesarias para adaptarlas a la modernidad.
La concejala de Vivienda, Marlene Romero, comenta por su parte que a mediados de julio saldrá la convocatoria para que la vecindad pueda solicitar acogerse a estas subvenciones, que permitirán realizar alguna obra, reforma, adaptación o instalación, con las que se podrá mejorar la accesibilidad y sostenibilidad de muchos hogares del municipio.
Esta subvención incluida en el apartado 6 del Plan Estratégico bienal de subvenciones del Ayuntamiento, para el fomento de la rehabilitación de viviendas de titularidad privada, dentro del Programa para combatir la despoblación del medio rural del Plan de vivienda de Canarias 2020-2025, que subvenciona con 637.756,18 euros de la cuantía total prevista de 764.491,65 para rehabilitación o adecuación de viviendas de titularidad privada a las condiciones mínimas de habitabilidad, ahorro de consumo energético, elementos estructurales y todas aquellas obras necesarias para el adecuado mantenimiento de las mismas, mejora la calidad de las viviendas particulares que constituyan el domicilio habitual.
Se pretende fomentar obras de rehabilitación en aquellas viviendas que no cumplan los requisitos de habitabilidad mínimos (instalaciones eléctricas, fontanería y saneamiento, refuerzo estructuras,...), además de acciones de mejoras en la accesibilidad y autonomía en el uso de las viviendas a personas con discapacidad funcional o movilidad reducida, apoyando las reformas necesarias en las viviendas, así como la instalación de diversos sistemas integrados en la vivienda que faciliten la movilidad y autonomía en la misma. Igualmente, la institución pretende incentivar las reformas en las zonas comunes en edificios de tipología residencial colectiva, que mejoren la calidad de vida de sus residentes (fontanería, accesibilidad, conservación, ...) y potenciando las obras con la finalidad de luchar contra la pobreza energética (viviendas unifamiliares y edificios de viviendas de tipología residencial colectiva), a la vez que incentivar las obras en viviendas aisladas en situación de fuera de ordenación para subsanar sus deficiencias y solventar su situación.