20 de noviembre de 2022, 10:50
Los bomberos del Consorcio de Seguridad y Emergencias del Cabildo fueron avisados este sábado por la noche de que se había producido un incendio en un cuarto de Las Maretas, en el barrio arrecifeño de San Francisco Javier.
Al llegar al lugar comprobaron que se trataba de un conato de incendio que estaban controlando los agentes de la Policía Local de la zona. Sofocaron el fuego y lo sorprendente vino después, cuando vieron que había una tapa de arqueta quitada y tirada al fondo de la mareta. Dentro de la arqueta, curiosamente, no había agua sino un carro de la compra que habían arrojado dentro los incívicos de turno.