Entre el viento y el mal estado de muchos edificios de Arrecife los bomberos del Consorcio de Seguridad y Emergencias se ven obligados un día sí y otro también de acordonar determinadas zonas para evitar que le caigan cascotes a los vecinos que circulan por la calle.
Es lo que ha sucedido este domingo, cuando los bomberos se han visto obligados a actuar en la calle Manolo Millares de la capital para tratar de que dejaran de caer partes de un edificio que hace esquina y que está justo en el arranque de la calle, justo en la intersección con la calle Fajardo.

Sobre las 17.00 horas los bomberos recibieron el aviso de la Policía Local de Arrecife. A la llegada a la zona comprobaron que, efectivamente, habían caído varios cascotes al suelo. En seguida balizaron la zona y retiraron los escombros.
Los agentes de la Policía Local hicieron las diligencias oportunas para que los técnicos municipales analicen la situación de los inmuebles.