Agentes de la Policía Local de Arrecife han llevado a cabo durante la reciente noche de Halloween del pasado 31 de octubre la detención de un varón de 31 años de edad, que está acusado de un delito de robo con violencia en grado de tentativa y de otro delito de exhibicionismo obsceno ante menores de edad.
Tal y como detalla este miércoles en nota de prensa el Ayuntamiento de Arrecife, los hechos sucedieron cuando una familia fue abordada por dos personas, que les ofrecieron comprar dos cadenas de oro. Ante la negativa de éstos a adquirir los productos, uno de ellos se abalanzó hacia la madre de la citada familia con intención de robarle la cadena que portaba. Acto seguido y por intentar defender a su madre, su hija de 11 años también recibió un golpe que la hizo caer al suelo.
Pero tal y como destaca en su escrito el Ayuntamiento y la Policía Local de Arrecife, los hechos no quedaron ahí: tras huir el acompañante del agresor, el mismo individuo comenzó a increpar y amenazar de muerte a la familia para posteriormente bajarse los pantalones y realizarse tocamientos obscenos.
Por los motivos descritos, una vez en el lugar los agentes de la Policía Local procedieron a la detención de esta persona que, según ha confirmado el Cuerpo municipal de Policía, está previsto que pase a disposición judicial en las próximas horas.
Halloween y los controles de alcoholemia
Por otra parte, en la misma nota la Policía explica que durante la reciente noche de Halloween del pasado 31 de octubre agentes locales también fueron alertados para atender diferentes servicios, entre ellos la quema de un contenedor orgánico en la calle El Antonio, que quedó completamente destruido; también se solicitó la presencia policial por dos alteraciones al orden en zonas de ocio nocturno, así como por una agresión entre varias personas en la calle Doctor Juan Negrín, tras la que dos de los implicados recibieron asistencia sanitaria.
Por último, y en el transcurso de un control de alcoholemia, la Policía Local capitalina indica que en tan solo media hora del dispositivo fueron interceptados 4 conductores que pasaron también a disposición judicial acusados de sendos delitos contra la seguridad vial por conducción bajo la influencia de bebidas alcohólicas. Se trata, advierte la Policía, de conductores que se enfrentan ahora por estos hechos a suspensiones del permiso de conducir durante un período de uno a cuatro años, así como a penas de prisión, penas de multa o trabajos a la comunidad.
Además, según la Policía Local de Arrecife, un quinto conductor también fue denunciado durante el transcurso de la noche por superar la tasa máxima de alcohol permitida, con multa de 500 euros y retirada de 4 puntos y por no haber sometido el vehículo a la Inspección Técnica (ITV) desde el año 2018.
