La Benemérita espera que en aproximadamente una semana la madre de Romina, Miriam Rodríguez, pueda viajar desde Paraguay hasta Lanzarote para cotejar el ADN de su progenitora con el resto orgánico encontrado en la Playa de Las Cucharas y confirmar la hipótesis que ha barajado desde los primeros indicios los investigadores. Las pruebas se realizarán en Madrid.
El Área de Bienestar Social del Cabildo de Lanzarote lleva semanas trabajando para poder financiar el coste de los billetes de la madre de Romina y de su hijo y, de hecho, la responsable del Área, Maite Corujo, explicaba esta semana en Crónicas Radio-COPE Lanzarote que las conversaciones con el Consultado y la coordinación con la Unidad de Homicidios de Las Palmas podrían fructificar en la llegada de los familiares de la joven desaparecida en los próximos días.
El perfil genético hallado por la Guardia Civil en un cepillo de dientes y en una hojilla de afeitar que la pareja compartió coincide con el del trozo de pulmón encontrado semanas atrás, pero el Instituto Armado argumenta, tras el levantamiento del secreto de sumario del caso, que su objetivo es lograr una prueba indubitada, es decir, que sea definitiva y que no pueda ser rebatida como prueba determinante. El resultado del cotejo del ADN de unos y otros restos no será por tanto concluyente.
El detenido no ha confesado el crimen pero sí que se deshizo del cadáver e insiste en que cuando llegó al domicilio de la urbanización El Palmeral el 31 de diciembre ya encontró el cuerpo sin vida de Romina en el baño. La Guardia Civil ha hallado restos de sangre humana fundamentalmente en el espacio entre la bañera y el inodoro, a modo de salpicaduras y de modo relevante como señal de arrastre desde ese lugar en dirección a la puerta.
Cabe recordar que los restos de pulmón fueron hallados por dos socorristas el pasado 5 de enero en la playa de Las Cucharas de Costa Teguise y depositados en un contenedor de obra cercano y posteriormente recuperados.
