El carguero, de bandera panameña, fue registrado y se halló la droga mencionada procediéndose a la detención de seis de sus tripulantes de nacionalidad cubana. Paralelamente se procedió a la detención de otras cinco personas, tres residentes en Las Palmas de G.C. dos de ellos de origen marroquí y la tercera de origen español junto a otras dos en Fuerteventura de origen español.
Desde julio de 2007 el Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga (E.D.O.A.) de la Comandancia de la Guardia Civil de Las Palmas y el Servicio de Vigilancia Aduanera de Las Palmas venían desarrollando una investigación conjunta sobre una organización criminal dedicada a la introducción y distribución de estupefacientes en las Islas Canarias, bajo la dirección del Juzgado de Instrucción nº Uno de Las Palmas de G.C. En la investigación colaboraron también las Autoridades Portuguesas.
Tras varios meses de investigación se tuvo conocimiento de que la citada organización delictiva tenía previsto recibir por vía marítima una partida de droga en abril del 2008, y que el “modus operandi” para introducir la sustancia estupefaciente en Canarias se realizaría a través de marineros embarcados en un buque mercante que hiciera escala en un puerto de Marruecos y posteriormente en algún puerto de Canarias.
Igualmente la investigación derivó a la isla de Fuerteventura donde la red contaba con infraestructura para colaborar en el desembarco de la droga para el caso de que la arribada del buque tuviese lugar en Puerto del Rosario aunque dicha circunstancia no se produjo pero la Guardia Civil puso al descubierto otra red local de distribución de drogas radicada en Gran Tarajal, Tuineje, que quedó completamente desarticulada con la colaboración de la Guardia Civil de Gran Tarajal y del Puesto Principal de Morro Jable además del Servicio Cinológico de Lanzarote. Cuatro de los detenidos ingresaron en prisión.