Ha pasado una semana desde que este diario recogió la denuncia de un grupo de vecinos que entendían que acudiendo a la prensa podrían solucionar un problema que lejos de resolverse ha ido a peor. Aunque el Cabildo ha habilitado la Ciudad Deportiva como albergue improvisado para todas las personas que deambulan por las calles de Arrecife por no tener un hogar en el que buscar cobijo en estos tiempos tan complejos y extraños en los que todos debemos colaborar para evitar la propagación del coronavirus, sigue habiendo personas que se niegan a ir y que se niegan a protegerse mínimamente, siendo por tanto un problema de salud ambulante para ellos y también para los demás.
Sigue siendo el caso de un ciudadano que ha montado su particular campamento en la calle Palencia, en el barrio de Los Alonso. Los vecinos no aguantan más, están indignados, de ahí que hayan vuelto a acudir a este medio para pedir que alguien ponga una solución inmediata.
Según explican, el hombre está todo el día tirado en la calle y dejando todo tipo de desperdicios en ese lugar que ha escogido como lugar de residencia. Para ellos lo grave no es desde luego la suciedad que genera, es el hecho de que en una crisis sanitaria como la actual, cuando se supone que todo el mundo tiene que estar confinado guardando cuarentena, nadie haga algo para que esta persona esté en un lugar adecuado, y no botado en la calle. A su juicio, es un peligro de salud pública para sí mismo y para otras personas que se acercan a él a diario para tratar de echarle una mano.
La indignación de los denunciantes es mayor cuando explican lo que entienden que han hecho las autoridades competentes. Afirman que han tratado sin éxito de ponerse en contacto con el Ayuntamiento de Arrecife y con la Policía Local. "Llamar al Ayuntamiento en estos días es perder el tiempo, no cogen el teléfono nunca. Las pocas personas que parece que pueden hacer algo y que han mostrado algo de interés por el tema nos dicen que no pueden hacer nada, que el hombre se niega a ir al albergue", explica frustrado uno de los vecinos.
Lo que piden es muy sencillo, que en una situación excepcional se actúe de forma excepcional, y si de forma voluntaria no quiere protegerse y proteger a los demás, que se le imponga, como se está imponiendo el confinamiento al resto de los vecinos, a los que incluso se llega a denunciar si sus salidas a la calle no están debidamente justificadas.
