Fotos: Dory Hernández
Malpaís ha llegado a su fin. Después de más de veinte días de teatro, música, cine y arte en las calles de Arrecife, la segunda edición del Festival dijo adiós el pasado sábado en la capital lanzaroteña. Y lo hizo con el más puro flamenco español, de la mano del legendario bailaor Antonio Canales a partir de las 21.00 horas del viernes y del sábado en el Recinto Ferial.
El festival escogió un espectáculo más selecto y especializado para clausurar el ajetreado programa con el que se ha volcado en su segunda edición. Canales, que subió al escenario durante dos noches seguidas, sembró con algo de desencanto a las mil personas que, según los datos de la organización, acudieron para ver su actuación cada día.
Una desmejorada forma física entorpeció sus pasos flamencos, aunque el brillante equipo que le acompañaba amortiguó su actuación y arrancó al público en aplausos en numerosas ocasiones. Dos bailarines, nuevos talentos del baile flamenco, se arrancaron entre tema y tema y de Canales con movimientos llenos de pasión y temple. Seis experimentados y talentosos músicos deleitaron a los asistentes durante los dos conciertos con lo mejor de la cuerda y la percusión castiza.
El problema del sonido en el Recinto intentó ponerle la zancadilla a una puesta en escena original y cargada de sentimiento. “Pese a las limitaciones acústicas estamos muy contentos tanto con cómo fue este concierto como con el resto de actividades que han integrado el progama”, señalaron desde la organización de Mallpaís para Crónicas. “La participación y seguimiento han sido enormes, tanto en las actividades de calle como en las del Recinto, por eso creo que, sin duda, habrá tercera edición”, añadieron.