- Se verifica oficialmente que el acusado en ningún momento ha confesado el crimen, alegando que se encontró a su esposa muerta en el baño cuando llegó a casa y que, asustado, quemó sus restos mortales y después los hizo desaparecer en distintos puntos de la costa lanzaroteña
La juez titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Arrecife ha acordado este pasado lunes el levantamiento de la orden de secreto de sumario que pesaba sobre la investigación por la desaparición el pasado 1 de enero de Romina Celeste Núñez, la paraguaya de 28 años de la que nada se sabe desde el día de Año Nuevo.
Según los datos del Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC), el Juzgado confirma la veracidad de la mayoría de los datos que se han difundido en las últimas semanas sobre el caso, por el que está ingresado en prisión preventiva el esposo de la desaparecida, Raúl Díaz, de 41 años, por la presunta comisión de los delitos de maltrato habitual y homicidio o asesinato.
Así, se verifica oficialmente que el acusado en ningún momento ha confesado el crimen, alegando que se encontró a su esposa muerta en el baño cuando llegó a casa y que, asustado, quemó sus restos mortales y después los hizo desaparecer en distintos puntos de la costa lanzaroteña.
La Autoridad Judicial ha confirmado que los restos orgánicos hallados por la Guardia Civil que presuntamente se vinculan al caso son humanos, concretamente un trozo de pulmón, si bien todavía no se ha podido verificar si corresponden a la desaparecida, porque por el momento no se dispone de ADN indubitado (de los familiares de la joven) que permita cotejarlos.
En este sentido, desde Bienestar Social del Cabildo de Lanzarote explican a este diario que llevan semanas coordinando con Homicidios en Las Palmas y el Consulado de Paraguay el pago de los billetes de la familia de Romina hasta la Isla.
El levantamiento del secreto de sumario, aclara el TSJC, no significa que las actuaciones sean ahora públicas, sino que se permite el acceso al proceso a todas las partes personadas. Hasta ahora, sólo podía consultar las diligencias previas el Ministerio Fiscal, esto es, a la defensa y a la acusación particular, personada en el proceso en nombre de la familia de la desaparecida.
El órgano instructor, único juzgado de Lanzarote con competencias en Violencia sobre la Mujer, continúa practicando pruebas de carácter reservado.