La Policía Nacional tuvo conocimiento de que una persona pudiera ser uno de los mayores distribuidores de sustancias estupefacientes en el norte de Lanzarote y que además se estaba aprovechando de su condición de empleado en un cementerio y en una perrera municipal para realizar las transacciones. En seguida se pusieron a investigar y descubrieron que se trataba del sepulturero de Tinajo, motivo que les llevó a abrir una operación que se ha saldado con su detención y con la de una mujer teóricamente implicada en el negocio.
Según la información trasladada este martes a Crónicas por la propia Policía Nacional, la investigación llevada a cabo pudo confirmar finalmente las sospechas de los agentes. Esta persona, conocida como “el sepulturero de Tinajo” a lo largo de las pesquisas, ocultaba y vendía las sustancias estupefacientes dentro de las instalaciones municipales aprovechando que era empleado de las mismas. Además, su pareja distribuía también la droga a las personas que acudían a estos lugares.
La operación policial culminó con la detención de ambos por tráfico de drogas y en los tres registros realizados fueron incautados 525 gramos de cocaína, 340 gramos de marihuana, 21.000 euros en efectivo y una báscula de precisión.
Tras ser puestos a disposición de la autoridad judicial competente, se decretó el inmediato ingreso en prisión del sepulturero, que tendrá que permanecer ahí hasta que se decrete su puesta en libertad o se celebre el juicio correspondiente.