“Hemos hablando con los responsables de emergencias locales y si se cifra el dispositivo en 8.000, ellos dicen que necesitarían 16.000 y para poder dar por finalizada la emergencia, no la rehabilitación, antes de navidad. Esto es impresionante. Se me ponen los pelos de punta”
“Ayer mismo cenamos lo que nos bajaron los vecinos donde estábamos achicando. Vinieron con cafés, bocadillos… Hay una empatía enorme por parte de los vecinos hacia los servicios de emergencias que impresiona y pone los pelos de punta”
“Nos comentaban el tema de la visita del presidente del Gobierno y lo que caldeó a la gente es que la calle que eligieron para pasear era una calle que no habían tocado en siete días pero como iba la comitiva, tres horas antes de que llegaran, pegaron una limpieza a la calle para que los niños no se ensuciaran los mocasines”
“Si a las 8:20 bajó la riada, a las 8:25 no tenía que estar movilizada media España, tenía que haber estado movilizada toda España”

“Pelos de punta”, “caos”, “disparate”… estos eran los términos que utilizó el director de Emergencias y Rescates de Lanzarote (EMERLAN), Rubén López, en el programa “A Buena Hora” de Crónicas Radio de este martes tras llegar apenas hace 24 horas al municipio de Silla, en Valencia, para ayudar en las labores de búsqueda, rescate y limpieza. Asegura que la movilización se tenía que haber hecho en cuanto comenzó la lluvia fuerte y entendió la frustración de los vecinos ante la falta de previsión; vecinos que se han volcado con ellos a la hora de ofrecerles alojamiento y comida pero que han criticado que se limpiara una calle para que el presidente del Gobierno “no se manchara los mocasines” cuando antes nadie había pasado por allí para arrimar el hombro. EMERLAN ha enviado desde Lanzarote a un equipo multidisciplinar con un camión de emergencias y un vehículo de intervención 4×4 equipados con motobombas y material de rescate para brindar apoyo en todo lo que sea necesario. Allí se han unido al equipo de drones que también estará a disposición de las necesidades que vayan surgiendo tras los efectos devastadores de la DANA.
- ¿Ya están a pleno rendimiento en Valencia?
- Sí. Nosotros iniciamos el sábado el viaje hasta Valencia. Llegamos el lunes y nos hemos incorporado a las labores de búsqueda, rescate y limpieza porque esto es un caos y hay que estar aquí para ver el disparate que es. Yo llevo 20 años en emergencias y aquí hace falta más personal, gente preparada, material; no se llega con lo que hay. No puede ser que después de siete días, nosotros fuéramos ayer los primeros en llegar de personal de emergencias.
- ¿No había ido nadie a esa zona antes que ustedes?
- Exactamente. Estuvimos achicando de un sótano que conecta por debajo ocho edificios; estuvimos hasta las 4 de la mañana y ahora vamos a vaciar ese sótano y verificar que en los vehículos no hay nadie.

- Cuando dice que se han encontrado un caos, ¿se refiere a la organización?
- Sí. Con nosotros sí lo han hecho bien porque desde el minuto 1 nos han asignado y ya estamos en un sector. Lo que pasa es que faltan medios y yo sigo sin entenderlo. Esto no es una cosa de que vengamos seis; tiene que haber más medios. Hemos hablando con los responsables de emergencias locales y si se cifra el dispositivo en 8.000, ellos dicen que necesitarían 16.000 y para poder dar por finalizada la emergencia, no la rehabilitación, antes de navidad. Esto es impresionante. Se me ponen los pelos de punta. Por donde pasamos, nos buscan los vecinos. Todo el mundo necesita ayuda. Impresiona mucho.
- ¿Es peor de lo que nos imaginamos?
- Sí. No tiene nada que ver lo que veíamos por la tele desde Lanzarote con la realidad. Los vecinos te cuentan, te ensañan fotos, te cuentan que tienen a familiares desaparecidos. La gente se queja de que falta mucha información. Los ciudadanos de a pie no consiguen que les den información sobre los desaparecidos y eso es frustrante. Estamos en un país desarrollado y habría que haber movilizado a todo el mundo desde el primer momento, no una semana más tarde. Si a las 8:20 bajó la riada, a las 8:25 no tenía que estar movilizada media España, tenía que haber estado movilizada toda España.
- Es algo parecido a lo que ocurre con la inmigración en Canarias, que los políticos se pelean por las competencias.
- Yo no sé si es por un tema político pero eso habría que dejarlo aquí a un lado. Esto es desolador. Esto no va de quién manda o no o quién entra o no. Ayer ya tuvimos que estar trabajando con mascarillas; esto va a peor y se necesitan equipos de respuesta; ya no sólo de emergencias, de limpieza con maquinaria pesada. Esto es muy grande pero España tiene que estar a la altura.
- Habrá infecciones provocadas por los cadáveres de personas, animales, las condiciones insalubres…
- El tiempo ahora es bueno pero no sabemos si hay personas donde nos estamos metiendo. Donde estuvimos trabajando ayer eran dos plantas subterráneas; la primera ya estaba casi achicada, se revisaron los coches, continuamos con la segunda, había que tener cuidado con la electricidad y una serie de precauciones y al final, son espacios tan grandes que necesitas un día entero solo para salir de una calle y eso ralentiza mucho toda la ayuda que se necesita. No hablamos de un garaje de 4x4; el de ayer era para 8 portales de edificios con 8 plantas cada uno.
- Uno de los comentarios que más se están oyendo es que no se están dando las cifras reales de muertos y desaparecidos. ¿Ustedes que sensación tienen ahora que están en la zona?
- Lo que nos dijo ayer el inspector jefe de los bomberos es que donde menos nos los esperemos, aparecerá alguien. Nosotros conseguimos revisar ayer la primera planta de un sótano pero la segunda no. Hay mucha vivienda vacacional y es posible que no se haya echado en falta a ningún vecino pero podía haber inquilinos y que estén abajo.

- ¿Cuántas horas están trabajando, dónde duermen, comen…?
- Nosotros estamos en Silla y dormimos en un apartamento que nos ha facilitado una ciudadana de forma totalmente gratuita. Es un apartamento que suele ser vacacional y que han puesto a disposición del personal y comemos lo que pillamos. Ayer mismo cenamos lo que nos bajaron los vecinos donde estábamos achicando. Vinieron con cafés, bocadillos… Hay una empatía enorme por parte de los vecinos hacia los servicios de emergencias que impresiona y pone los pelos de punta y cuando les escuchas, entiendes un poco más la situación y por qué están tan cabreados.
- ¿Ellos creen que se podrían haber evitado parte de la tragedia?
- Sí. Todo el mundo piensa que el aviso llegó super tarde y es la realidad. El aviso llegó muy tarde. También nos comentaban el tema de la visita del presidente del Gobierno y lo que caldeó a la gente es que la calle que eligieron para pasear era una calle que no habían tocado en siete días pero como iba la comitiva, tres horas antes de que llegaran, pegaron una limpieza a la calle para que los niños no se ensuciaran los mocasines. Ese es el cabreo. Ves las imágenes y piensas que no hay que llegar al extremo de agredir pero es que cuando tú ves que llevas seis días sin que nadie venga y que cuando vienen es porque llega una comitiva y no quieren que se ensucien los zapatos, los vecinos nos decían que si venían, que se metieran en el fango con ellos.
- ¿Cuánto tiempo van a estar?
- No lo sabemos. Iremos valorando día a día y vamos a hacer como en el Volcán de La Palma. Nosotros ya tenemos aquí los recursos; lo que tendremos que ir haciendo son relevos de personal. Lo que ya hemos venido estaremos seguramente hasta el jueves y en función de cómo vaya avanzando la emergencia y las necesidades que haya, iremos valorando porque si no te dan un cometido o si en tres días mejora mucho la cosa, no tendría sentido estar aquí.
- ¿Han coincidido con los bomberos de Lanzarote que también han ido para allá?
- No porque ellos están por otra zona y esto es muy grande. Son varios ayuntamientos y a nosotros nos tocó en la zona de Silla, en el sector 4, y ellos están en otro sector. No hemos coincidido.