Uno de los culebrones más largos de la siempre conflictiva historia inmobiliaria de Lanzarote parece que llega a su fin. Las cientos de personas que en estos momentos ocupan la parcela de entrada a Costa Teguise del frustrado proyecto turístico "Club del Rey" han comenzado a recibir desde este lunes las cartas del Juzgado de Arrecife que está llevando la petición de desahucio por parte de los propietarios, que desde hace años quieren rehabilitar la zona. Este viernes tienen que acudir al Juzgado de Paz de Teguise, donde se les notificará la orden oficial de que abandonen el lugar en el que se encuentran de forma ilegal y el plazo que les dan para hacerlo de forma voluntaria.
Así lo han confirmado a Crónicas diferentes fuentes consultadas, incluyendo alguno de los inquilinos de lo que en principio era una ruina abandonada por la orden judicial de paralización de la construcción y poco a poco se ha convertido en una urbanización en la que se han hecho todo tipo de obras y en la que ha sucedido prácticamente de todo a lo largo de los años. Fuentes jurídicas y municipales han preferido no lanzar las campanas al vuelo una vez que ha pedido este diario confirmación sobre la noticia al alegar que, aunque es cierto que es la última parte de la resolución del conflicto, todavía queda un camino relativamente largo para que se puedan llevar a cabo todos los desalojos, los voluntarios y los que finalmente, como sucedió en una urbanización similar de Playa Blanca en enero de 2024, haya que hacer por la fuerza y probablemente con presencia de agentes de la Guardia Civil y de la Policía Local.

Pero la noticia, buena especialmente para los propietarios de la enorme parcela y para el hotel que se encuentra al lado y el que está enfrente, que llevan décadas padeciendo el tener que explicar a sus clientes el porqué de esa imagen tan impactante justo a la entrada de una urbanización de máximo nivel turística y residencial como es Costa Teguise, es la que es. Estamos claramente ante la cuenta atrás del final de la historia de ocupación de esa zona.

Cada historia en el interior de ese lugar es absolutamente diferente, de ahí que haya tenido que intervenir el Ayuntamiento de Teguise y su departamento de Servicios Sociales para abordar caso por caso. Algunas de las familias que están dentro no son simples okupas sin recursos, son personas que tienen trabajo pero que padecen una de las principales lacras del Lanzarote actual, la falta de vivienda. Algunas de esas familias tienen hijos que han sido escolarizados también en los centros de la zona. Es una de las razones que ha hecho que sea tan difícil analizar este asunto por el Juzgado que lo ha llevado en Arrecife, y será una de las razones seguramente que hará mucho más lento el desalojo de la gente que trate de estar hasta el último momento ante la imposibilidad manifiesta de encontrar una alternativa habitacional en la Isla.
Proyecto de los propietarios
Después de más de dos décadas de espera, después de infinidad de idas y venidas al juzgado, la famosa y polémica parcela 214 de la que para muchos es la mejor urbanización turística y residencial de Canarias, cambiará por tanto de aspecto si todo marcha según lo previsto. Tanto los propietarios como el equipo de arquitectos que va a desarrollar el proyecto que modificará de forma definitiva una imagen lamentable que ha pesado como una losa sobre los distintos gobiernos que heredaron en su día una de las consecuencias de la fallida moratoria turística que promovió el socialista Enrique Pérez Parrilla lo anunciaron en 2023: tienen un proyecto que creará un antes y un después en el lugar.
La historia de la parcela de entrada a Costa Teguise es la historia de un lío jurídico y empresarial que el ex alcalde Oswaldo Betancort heredó del turbulento pasado de la política local y que hasta el día de hoy ha sido imposible resolver. A pesar de ello, a pesar de que una y otra vez se explicó que el Gobierno local no podía intervenir sin una orden concreta de los juzgados y una acción decidida por parte de los propietarios del suelo, los partidos de la oposición municipal, especialmente el Partido Socialista (PSOE), han usado la situación de la parcela como principal arma arrojadiza contra Betancort, ahora contra Olivia Duque, y contra Coalición Canaria (CC), al entender que se trata de un filón electoral por el enorme impacto visual que suponen los esqueletos de lo que fue un intento de construcción, el abandono general del lugar y el enorme problema de ocupación que se ha producido posteriormente. De hecho, en estos momentos habitan allí numerosas familias que se han instalado en esas ruinas por la falta de vivienda que hay en Lanzarote. Algunas incluso han hecho importantes reformas del inmueble abandonado en principio a su suerte para tener un lugar digno en el que poder vivir o sobrevivir, en algunos casos con inversiones y ejecuciones ciertamente sorprendentes. No siempre fue así. Hubo años, sobre todo al principio y cuando no había los problemas de vivienda en Lanzarote que hay en estos momentos, que la construcción estaba prácticamente abandonada y sólo se usaba por personas que iban allí a hacer grafitis. Todo eso cambió, como ahora quieren los propietarios que cambien si ejecutan una iniciativa para la que parece que tienen ya todas las bendiciones necesarias

El arquitecto Javier Serrano Hernando, de HS Estudio de Arquitectura de Las Palmas, publicó en ese 2023 el boceto del proyecto y la imagen de cómo quedaría un espectacular hotel que desde luego terminaría de forma definitiva con lo que está sucediendo actualmente allí. Lo hizo en su perfil profesional y a instancias de los propietarios del suelo, orgullosos de lo que van a hacer y convencidos de que será un auténtico éxito por su diseño y por la forma en la que va a quedar, todo adaptado a la situación de la parcela, a la idiosincrasia de la zona y a las cuestiones que se exigen en estos momentos para poder ofrecer una oferta alojativa de máxima calidad. “Compartimos con vosotros nuestra último proyecto: la rehabilitación y diseño de un hotel en Costa Teguise, Lanzarote. Este proyecto nos permite poner en práctica nuestra creatividad y pasión por la arquitectura, para lograr un espacio moderno y acogedor que se integra perfectamente con el entorno natural. En este hotel, se combinan materiales naturales con elementos tecnológicos, creando una atmósfera única y relajante. ¡Estamos muy orgullosos del resultado!”, remarcó Serrano Hernando en su publicación de 2023.
Antes de que pueda ser una realidad ese proyecto se tiene que producir el desalojo de toda la gente que está allí, tarea que, como han remarcado a este diario todas las fuentes consultadas, no va a ser sencilla.