Crónicas Radio continúa con su apuesta por realizar programas especiales sobre los asuntos que normalmente no se abordan en las emisoras de radio, y mucho menos en los programas informativos de la mañana. Asuntos que no se tratan en estos espacios pero que sin embargo son esenciales para entender la sociedad del presente y la del futuro. En el programa que abre las mañanas de la emisora con mayor programación local de Lanzarote, el “A buena hora”, desde hace meses se está abordando el problema de la salud mental desde diferentes prismas, llegando incluso a profundizar en temas que hasta ahora han sido tabú como el suicidio. Algunos creerán que tarde, pero parece obvio que la salud mental, uno de los grandes problemas del siglo XXI, debe formar parte de la programación de los medios de comunicación. En el Grupo Crónicas lo tenemos muy claro.
Por eso, gracias a la coordinación que está realizando Alby Ramírez, trabajador de la Unidad de Rehabilitación Psicosocial de Lanzarote (URPS), se han ofrecido a la agradecida audiencia de la emisora varios programas orientados a conocer un poco mejor los aspectos que rodean a la salud o enfermedad de la mente de las personas. En esta ocasión, fue Alby Ramírez quien propuso centrar el programa especial en el tema de las adicciones, que son, desde sus diferentes aspectos, una parte muy importante y responsable de numerosos trastornos que conducen a distintas disfunciones de la mente.
Junto a él se sentaron en el estudio de Crónicas Radio un hombre que no huye jamás de este tipo de análisis, como es el consejero de Bienestar Social del Cabildo de Lanzarote, el psicólogo Mariano Acuña, especialista además en este tipo de trastornos; el psicólogo de la Red de Adicciones de Lanzarote, ex coordinador de este departamento y ex director de la URPS, Manuel Hernández, y Alejandro González, quizá el testimonio que más llegó a la gente al haber sido usuario de la Red y al confesarse alcohólico, a pesar de llevar 13 años sin probar una gota de alcohol. Alejandro González, que ha recobrado la lucidez y la sensatez después de haber estado en la mayor de las penumbras, es actualmente directivo de El Cribo, una organización que en Lanzarote no requiere de presentación ninguna y que cuida como pocas a las personas que sufren problemas en el interior de su cabeza.
Durante poco más de una hora los cuatro hablaron, respondieron a las preguntas de los oyentes y contaron sus increíbles experiencias. Alejandro González quiso dejar claro que de la mayor de las adicciones, como pudo ser la suya, se sale, pero sólo con una enorme fuerza de voluntad y con la ayuda de un entorno sano que te acompañe en el difícil trayecto. “Es una condición que me gané a pulso. El alcoholismo no se cura; la única medicación que tengo es vivir en abstinencia, no hay otra. Y sobre las patologías, efectivamente, se me diagnosticó trastorno de personalidad y alguna otra cosa más que gracias a Dios hace ya unos cuantos años que no tengo presente. De hecho, hace años que no paso por la Unidad de Salud Mental. Si se quiere salir de una adicción se sale; hoy hay medios y unos profesionales como la copa de un pino dedicados por entero a estos temas. Pero si la voluntad del individuo no está por la labor, por mucho que le digas no hay salida porque él no quiere que la haya”, contó en parte de su seguida y aplaudida intervención.
Manuel Hernández, con un tono pausado y a veces casi en susurro, puso el acento sobre la enorme experiencia que atesora, centrándose en aspectos que parecen de sobra conocidos pero que por curioso que parezca no se repiten entre todos los individuos que tienen una adicción. “Todo esto se encamina un poco en España en el año 2005 cuando se fundó la Asociación Española de Patología Dual. Ahí ya se quiso ver otro enfoque, porque la realidad siempre va por delante de lo que se creía conocer, ¿y qué estábamos viendo?, que personas que inicialmente habían desarrollado un trastorno mental, por una adicción en este caso, paralelamente desarrollaban otra modalidad que no tenía nada que ver. Entre ellas pues destacan los trastornos depresivos, trastornos de ansiedad, trastornos de personalidad, psicosis, trastorno bipolar, otras adicciones conductuales como la ludopatía… El manejo de estas personas se hacía como más complejo y más difícil. Históricamente, habíamos tenido tres redes siempre en todos los ámbitos, el nacional, el del Gobierno de Canarias y el insular. Dos redes, la red de salud mental que siempre ha funcionado tratando los problemas de salud mental que hemos comentado y las redes de adicciones. Ahí tenemos un problema, que se trataban las distintas patologías en distintos recursos. Entonces, la Asociación fue el primer paso para decir, oye, tenemos que dar otro enfoque porque en este funcionamiento las personas se perdían. No sabías dónde ibas primero, no teníamos los recursos específicos, los niveles de coordinación no eran los adecuados. Ya se empezaban a entender los trastornos no como vicios, lo que la gente ha escuchado que hace mucho daño, que es estigmático, porque creen que las personas no quieren dejar esto y son viciosos, y ni mucho menos”, concretó el psicólogo.
Alby Ramirez, que además de coordinar y preparar el programa con el periodista Alfonso Canales aportó también parte de su enorme experiencia, respondió a numerosas dudas, entre otras los pasos que se deben seguir cuando se detecta una adicción en cualquier persona. “Al final siempre la puerta de acceso es tu médico de cabecera y los servicios sociales que tenemos aquí; puedes acudir y explicar el problema que tienes y ellos lo sabrán derivar a los recursos que tenemos, que en el caso de Lanzarote son magníficos. Manolo está trabajando mucho con el tema de los jóvenes, por ejemplo, pero hay muchos más campos que aborda el resto de los compañeros. Las etapas iniciales son muy importantes porque van generando conductas que luego cuanto más pasa el tiempo más difíciles son de abordar”, advirtió.
El consejero de Bienestar Social del Cabildo, que ha participado en casi todos los programas que ha realizado la cadena para hablar de salud mental, también aportó lo mucho que conoce sobre el tema de las adicciones. Aunque dijo que se está haciendo una gran labor en estos momentos para prevenirlas y combatirlas, tiene muy claro que se está a años luz de decir que no es un problema social, porque lo es. Hasta el punto de que entiende que en casos concretos como el alcoholismo, la ludopatía o el mal uso de las tecnologías hay que empezar a cambiar los comportamientos actuales, dándole importancia a lo que realmente la tiene. “Parece que está hasta como bien visto que en tus etapas de madurez vayas incorporando ese tipo de comportamientos adictivos. Y eso entre todos tenemos que cambiarlo, cambiar esa situación, a través de la prevención, la educación, el cuidar que no sirva como buen ejemplo algo que está claramente mal. Lo importante es que hoy tenemos también que poner aquí en valor que hasta ahora o hasta hace unos años, como decía Manolo antes, trabajábamos la adicción por un lado y la salud mental por otro. Y no podemos conseguir la abstinencia dejando de lado su salud mental. Van unidas, y así, teniéndolo claro, se consiguen mayores logros”, enfatizó por último.